Los coquitos o cocaditos son unos pequeños bocados dulces de coco de lo más deliciosos y aunque se comen todo el año es en navidad cuando más se consumen.
Son muy fáciles de hacer y desprender un aroma a coco que da gusto, ya verás, el día que los prepares ambientaréis toda la casa con este rico olor.
Son riquísimos, se endurecen por fuera y quedan muy suaves por dentro con ese rico sabor a coco y además son aptos para los celiacos, no llevan ni una gota de harina.
Bueno espero que os guste.
Aprovecho esta receta para presentarme al reto de Navidad de Corner GP
Video receta de los coquitos o cocaditos:
Coquitos o cocaditos
Ingredientes:
250 gr de coco rallado
250 gr de azúcar común
3 huevos grandes tamaño L
Elaboración:
Pesamos los ingredientes y los dejamos a mano.
En un bol amplio echamos el coco rallado y lo revisamos quitando los posibles grumos que pudiera tener. Le añadimos el azúcar y mezclamos todo muy bien. Hacemos un volcán dejando un hueco en el centro. Vamos ir añadiendo los huevos en el centro, os recomiendo que casquéis los huevos uno a uno y en un recipiente aparte de este modo no caerá ninguna cascara o si sale un huevo malo no nos estropeará toda la preparación.
Mezclamos todo muy bien con la ayuda de una cuchara de tal forma que quede una masa homogénea, si el coco estaba un poco seco, por el paso del tiempo o por estar abierto puede que tengáis que echar un huevo más.
Tapamos la mas y la dejamos reposar en el frigorífico durante al menos 2 horas.
Una vez transcurrido este tiempo encendemos el horno a 180º C con calor arriba y abajo y dejamos que se vaya calentando.
Preparamos la bandeja del horno con papel de horno, y rellenamos una manga pastelera con boquilla abierta y rizada, si no tenéis manga no os preocupéis podéis formar bolitas con la manos y colocándolas en la bandeja, si utilizáis la manga escudillar pequeños montoncitos de tamaño bocado sobre la bandeja un poco separados de unos de otros.
Y una vez que el horno este bien caliente metemos en el horno y dejamos 5 o 6 minutos aproximadamente hasta que estén dorados, es normal que por la parte inferior, la que esta sobre la bandeja, queden mucho más dorados.
Sacamos del horno y dejamos enfriar.
Ahora ya están listos para disfrutar. Podéis guardarlos en un recipiente hermético para que os duren más tiempo.
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