La crema de calabacín es sin duda una de las cremas más repetidas en nuestro día a día y yo aún no la tenía en el blog. Así que me he animado a prepararla para ir completando la oferta de cremas del blog, que es bastante grande y variada. Tenéis cremas deliciosas en el recetario: crema de alcachofas, crema de berenjena y puerros, crema de guisantes, crema de zanahoria y boniato o crema de coliflor, brócoli y berenjena. Algunas de mis favoritas, ¡pero tenéis más!
Además, os traigo una forma original y completa de presentarla, por si queréis hacerla en una comida o cena más especial: crema de calabacín con crujiente de queso parmesano. Estos crujientes de queso quedan tan ricos que os van a enamorar y los vais a poner a partir de ahora en todas vuestras cremas, no solo en esta. Además, en la receta de crema de alcachofa os traje un crujiente de jamón serrano que os encantó y quedará genial en esta también; así como los garbanzos crujientes y especiados de la crema de zanahoria y boniato. Son formas originales y diferentes de presentar las cremas que le dan un toque especial.
Las cremas son algunas de las recetas más leídas del blog y no tenía todavía una de las cremas más cocinadas: crema de calabacín. Además, la forma de presentarla con estos crujientes de queso parmesano la convertirán en vuestra crema favorita... ¡Ya lo veréis!
CREMA DE CALABACÍN CON CRUJIENTE DE QUESO
Dificultad: Fácil
Horneado: 10 mins para los crujientes
Tiempo: 50 mins (aprox)
Temporada: Sin temporada
Raciones: 4 personas
Etiquetas: Primero, crema
INGREDIENTES
Un chorrito de aceite de oliva
Cuatro calabacines
Una patata mediana
Una cebolla
Dos puerros
Dos quesitos (opcional)
Caldo de verduras
Sal y pimienta
100 gr de queso parmesano
100 gr de yogur natural
CÓMO SE HACE
- Comenzamos cortando el calabacín en rodajas, podéis pelarlo, pero a mí me gusta con piel, queda más intenso el verde, pero hay que lavarlos bien previamente. Reservamos.
- Pelamos la patata. Picamos la cebolla y los puerros. Reservamos.
- En una cacerola amplia añadimos un chorrito de aceite. Calentamos a fuego medio-alto y añadimos la cebolla y el puerro. Dejamos que se doren ligeramente.
- Añadimos el calabacín y lo cocinamos ligeramente.
- Cortamos la patata, chascándola, y la añadimos a la cacerola. Cocinamos un par de minutos todo junto.
- Cubrimos con caldo de verduras, hasta cubrir las verduras, y añadimos sal y pimienta al gusto. Podéis añadir más especias u hojas de laurel, si os gusta.
- Llevamos a ebullición y bajamos el fuego a fuego medio-bajo. Dejamos cocinar todo junto unos 20-30 minutos, hasta que las verduras estén tiernas.
- Retiramos un vaso de caldo (si queda) y batimos todo bien, hasta conseguir una crema homogénea. Vamos añadiendo el caldo si queremos que quede más líquida, midiendo bien la densidad de la crema que queremos.
- Añadimos los quesitos, dejamos que se fundan bien y mezclamos todo hasta que quede bien homogéneo. Añadimos más sal y pimienta, si creemos que lo necesita. ¡Ya la tenemos lista!
- Precalentamos el horno a 200ºC. En una bandeja ponemos una hoja de papel de horno. Rallamos el queso parmesano y formamos círculos con el queso, que no queden finísimos, pero tampoco unas montañas. Metemos en el horno y dejamos que se doren ligeramente, unos 10 mins, o algo menos, id viendo. Dejad enfriar para que cojan consistencia. Podéis hacerlos con antelación.
- Servimos la crema en caliente, añadiendo una cucharada de yogur líquido y formando dibujos en la parte superior y acompañada de un crujiente de queso parmesano.
¡A disfrutar!
TRUCOS Y CONSEJOS
Podéis obviar los puerros, si queréis, pero a mí me encanta cómo queda con ellos.
Los quesitos le dan una cremosidad extra, pero podéis evitarlos si no queréis añadir lácteos a la crema.
Fuente: este post proviene de Jaleo en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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