Hablar de guisantes frescos es, en mi opinión, palabras mayores. Poco o nada tienen que ver estos guisantes, recién recolectados, con los que podamos comprar congelados, su textura y sabor distan muchísimo. Una crema de guisantes utilizando guisantes de calidad pasa de ser un plato mediocre a ser una auténtica delicia.
Se trata de una leguminosa con alta porcentaje de hidratos de carbono, vitaminas y fibra. Su sabor delicado y su textura suave transformará cualquier guarnición en un lujo. Es cierto que su precio es elevado debido seguramente a la brevedad de su temporada, pero os aseguro que vale la pena preparar cualquier receta en la que los guisantes sean los protagonistas, si conseguimos guisantes frescos. Ya sea esta riquísima crema o los clásicos guisantes con jamón, se convertirán en uno de vuestros platos favoritos.
Tenemos que tener en cuanta, al considerar las proporciones, que el peso de los guisantes con su vaina se reducirá a la mitad una vez que se la retiremos, por eso, para la receta de hoy, crema de guisantes, necesitaremos unos 800 gr. de guisantes con vaina.
Os animo a que os deis el gusto de disfrutar de este vegetal, el resultado os prometo que vale la pena.
RACIONES: 4
DIFICULTAD: baja
TIEMPO: 30 minutos
CREMA DE GUISANTES:
400 gr. GUISANTES FRESCOS (su peso con vaina será el doble)
150 GR. PUERRO
150 GR. PATATAS
ACEITE DE OLIVA
CALDO DE AVE O CARNE
SAL
QUESO PARMESANO (para decorar)
1.- Limpiamos el puerro y lo cortamos en dados. Añadimos un chorrito de aceite de oliva a una cazuela y, cuando esté caliente, añadimos el puerro troceado. Sofreímos, removiendo de vez en cuando durante 10 minutos.
2.- Pelamos las patatas y la añadimos a la cazuela rompiéndolas en trozos. Continuamos sofriendo el puerro con las patatas durante 10 minutos, hasta que vemos que es puerro está blandito.
3.- Mientras se cocinan las verduras desgranamos los guisantes. Los añadimos a la cazuela, salamos y cubrimos con el caldo.
4.- Cocemos las verduras durante 10 minutos. Trituramos con la batidora, el chino o el pasapurés y servimos espolvoreando cada ración con queso Parmesano.
Fuente: este post proviene de Galletas para Matilde, donde puedes consultar el contenido original.
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