Sin lugar a dudas, las croquetas destacan por su gran adaptación a los sabores, permitiendo así una gran variedad de ingredientes que en ellas se pueden combinar, lo que hace que sea un plato que, normalmente, gusta a la mayoría. Como pasa en estos casos, y más tratándose de un plato tan tradicional, podemos encontrar una gran variedad de croquetas precocinadas en las estanterías de nuestro supermercado habitual, ya que, aunque no se necesita un Nobel para hacerlas en casa, sí que conllevan un largo proceso de elaboración.
Una vez explicado todo esto, solo nos falta contaros como preparamos en casa nuestras croquetas, concretamente las "croquetas de jamón ibérico".
Para hacer 24 croquetas, necesitaremos los siguientes ingredientes:
1/2 litro de leche
50 gr. de harina
100 gr. de jamón ibérico
1 diente de ajo
Media cebolleta
50 gr. de mantequilla (o aceite de oliva)
Pan rallado
2 huevos
Aceite de oliva
Sal
Antes que nada limpiaremos la cebolleta y la cortaremos tan pequeña como nos sea posible. Una vez hecho, pelaremos y picaremos el diente de ajo.
Por otro lado, pondremos una olla al fuego con la mantequilla y cuando se haya derretido, añadiremos la cebolla y el ajo picados y lo cocinaremos a fuego medio unos minutos hasta cristalizar.
Mientras tanto, picaremos el jamón ibérico tan pequeño como nos sea posible. Cuando la cebolla haya cristalizado, añadiremos el jamón y lo mantendremos medio minuto removiendo constantemente. Una vez hecho, añadiremos la harina y continuaremos removiendo.
Una vez tengamos una mezcla homogénea, añadiremos poco a poco la leche. Mientras hacemos este paso, tenemos que ir mezclando e integrando la leche en la masa, poco a poco para evitar grumos. Es decir, a medida que la masa se vaya endureciendo, iremos añadiendo la leche y removiendo a la vez hasta conseguir una masa consistente y homogénea. Normalmente esto os sucederá a la media hora, así que, andad preparados y con el brazo dispuesto a durante ese rato.
Finalizado este paso, dejaremos reposar y enfriar la masa, para ello, la pondremos en un recipiente plano y la taparemos con papel film, haciendo que este toque la masa (así evitaremos que en esta se forma costra), y la dejaremos en el frigorífico como mínimo 8 horas.
Una vez reposada la masa, llegará el momento más divertido, dar forma a las croquetas. Para ello, una vez decidida la forma que le queramos dar (redonda, alargada, etc.), iremos cogiendo pequeñas porciones de masa, les daremos forma, las rebozaremos por huevo y pan rallado y las dejaremos reposar unos minutos más.
Finalmente ya solo nos faltará freír las croquetas. Para ello, si no disponemos de freidora, pondremos abundante aceite en una sartén y cuando este esté caliente, iremos poniendo croquetas y controlándolas bien para que no se nos quemen. Por último, y en forma de consejo, os recomendamos que al sacarlas del aceite, las pongáis un rato sobre papel absorbente para evitar así el exceso de aceite.
Aquí os dejamos una posible presentación:
Croquetas de jamón ibérico con chutney de calabaza
¡Buen provecho!