Este domingo inauguré la sección "Sobre mí", en la que podréis ponerme cara y conocerme un poco más. En ella ya dejo claro que soy un fan absoluto del joven mago británico. Sí. Me leí el primer libro antes de que saliese la película, adelantándome a todo el furor que trajo consigo. La verdad es que es una saga que ha marcado mi infancia-juventud y con la que a día de hoy sigo disfrutando.
Tengo todos los libros, y cuando digo "todos" no me refiero solo a los siete volúmenes de aventuras de Potter. No. Me refiero a que tengo todos los demás que ha sacado la autora relacionadas con el mismo universo. Además, como me apasiona el cine, conseguí un libro maravilloso en fnac en el que te dan todas las pistas y trampas que hicieron durante la película para construir el universo que hemos visto en la gran pantalla.
De ese libro he sacado parte de los props de estas fotos. Sí, además incluye objetos similares a los que se han usado en la película, como la carta (con sobre incluido) que le llega a Harry, las invitaciones al baile de Navidad, el programa del Mundial de Quidditch, el Mapa del Merodeador... ¡Es impresionante!
Es uno de esos libros que si te gusta el cine y te gusta Harry Potter disfrutas leyendo hasta su último carácter. Te explican cómo adaptaron a la gran pantalla a los diferentes personajes, de dónde sacaron la inspiración para construir los decorados e incluso órdenes de rodaje y detalles de producción. ¡Una joya!
Lo mejor de estos cupcakes es la sorpresa que te llevas al morderlos. Están preparados para que funcionen como el sombrero seleccionador, para elegir a qué casa vas a ir: Griffindor, Hufflepuff, Slytherin o Ravenclaw. Al morderlos, el corazón del cupcake será el encargado de decírtelo...
Espero que os guste mi nueva ida de olla. Original son un rato laaaaargo, ¿o no? Supongo que los fans de Harry Potter los disfrutaran tanto o más que yo. Los demás... ¡también! ¡A disfrutar con esta nueva y divertida receta!
Cupcakes de Harry Potter
Dificultad: Fácil
Tiempo horneado: 20-25 mins. (aprox)
Raciones: 12
Etiqueta: Cupcakes
Masa
115 gr de mantequilla
220 gr de azúcar blanco
3 huevos
220 gr de harina
Una cucharadita y media de levadura
Una cucharadita de extracto de vainilla
120 ml de leche
Sirope de chocolate
Colorantes: azul, rojo, amarillo y verde
Buttercream
250 gr de mantequilla a temperatura ambiente
250 gr de azúcar glacé tamizado
125 gr de chocolate con leche
Decoraciones de fondant
Purpurina comestible
- Precalentamos el horno a 175ºC.
- Preparamos la bandeja de cupcakes y colocamos los papeles en los huecos.
- En un bol mezclamos la mantequilla con el azúcar hasta obtener una mezcla blanquecina y homogénea.
- Añadimos los huevos uno a uno y vamos batiendo para que se incorporen bien a la masa.
- Tamizamos juntas la harina y la levadura y vamos añadiéndola a la masa y mezclando con la espátula mediante movimientos envolventes.
- Añadimos el extracto de vainilla.
- Añadimos la leche y mezclamos con cuidado. Si batimos muy rápido la leche se desparramará-
- Vamos rellenando las cápsulas con la mezcla. Yo uso una cuchara de helado para servir en todas la misma cantidad de masa. Además, ¡es más rápido!
- Ahora llega el toque más "potteriano". Cogemos los colorantes, metemos un palillo en cada uno y lo metemos en el centro de cada cupcake y damos unas vueltas. De esta forma el centro se teñirá de ese color. ¡Atención! No podéis utilizar el mismo palillo una vez que esté usado. Si metemos el palillo sucio en nuestros colorantes estos acabarán cogiendo moho y se echarán a perder. ¡Tened mucho cuidado.
- Mantenemos en la bandeja durante al menos diez minutos y los colocamos en una rejilla.
- Dejamos que se enfríen, no podemos colocar el buttercream mientras están calientes o la mantequilla se irá derritiendo y acabaremos perdiéndola.
- Derretimos el chocolate con leche al baño maría. ¡Cuidado que no se os queme! Reservamos.
- Con un descorazonador de manzanas retiramos parte del centro de nuestro cupcake y lo rellenamos con sirope de chocolate. Volvemos a introducir lo que hemos retirado, tapando el agujero.
- Para hacer el buttercream, en el bol de nuestra batidora ponemos la mantequilla a temperatura ambiente con el azúcar glacé. Mezclamos a velocidad baja durante al menos tres minutos y subimos a velocidad alta durante al menos cinco minutos, hasta que veamos que tiene la textura de un helado.
- Cuando el chocolate se haya enfriado pero no haya cogido consistencia, lo añadimos al buttercream y volvemos a batir hasta que esté bien incorporado.
- Colocamos el buttercream en una manga pastelera con una boquilla de estrella (yo he usado la 2D de Wilton) y decoramos los cupcakes.
- Espolvoreamos un poco de purpurina para darles un toque más mágico y colocamos alguna decoración relacionada con Harry Potter. Yo he puesto el rayo y las gafas, la bolsa de grageas Berttie Botts, el gorro de bruja, la Nimbus 2000, la snitch dorada y un caldero chorreando. ¡Que viva la imaginación!
¡A disfrutar!
Fuente: este post proviene de Jaleo en la Cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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