Estas ideas tan sencillas son las que más me gustan, pues en pocos pasos tendremos creados unos portavelas ideales para ese rinconcito tan acogedor, con suave iluminación y gran romanticismo.
Compré en el Ikea estas velas en portavelas de cristal con olor a vainilla, pero a vainilla de verdad, por eso me encantaron.
Pero muy sosas.
Y dije, por qué no darles un toque diferente?
Cogí tijeras, punzón, troqueladora, papel Kraft, cuerda rústica y Lace Tape blanco, y me puse manos a la obra!
Empecé haciendo unas hojitas en papel kraft con la ayuda de la troqueladora y con el punzón las hice un agujerito para pasar la cuerda por ellas.
Pegué el Lace Tape al portavelas de cristal y coloqué encima mi cuerda adornada con las hojitas.
Nada, súper sencillo! No me digáis que el resultado no quedó monísimo!
Puede ser una buena idea para regalar por el Día de la Madre, que lo tenemos a la vuelta de la esquina :)