Una ensalada muy completa, que nos puede servir como plato único, que acompañado de un buen postre os aseguro que no os quedaréis con hambre. La lechuga es una hortaliza que se diferencia por su característico sabor y destaca por su elevado aporte vitamínico. El puerro es un buen sustituto del ajo y la cebolla, ya que posee propiedades parecidas, pero su sabor es más suave, y la berenjena, hortaliza que aporta muy pocas calorías es sin embargo una excelente fuente de antioxidantes. Creo que no se puede pedir mas, una gran ensalada.
Con esta ensalada participo en el reto de Desafío en la Cocina del mes de Junio de 2019 Ingredientes:
1 lechuga
1 bote de maíz
1 berenjena
1 puerro
1 lata de pimiento rojo
queso fresco
aceitunas negras con hueso
aceite, sal y vinagre
Preparación:
Lavamos y secamos las hojas de lechuga. Pelamos la berenjena y la cortamos en rodajas finas. Pelamos el puerro partimos el tallo en tiras finas.
El queso fresco lo partiremos en dados pequeños.
Abrimos la lata de pimiento rojo y cortamos tiras de pimiento.
Ponemos a calentar un poco de aceite en una sartén y cuando esté caliente freímos las tiras de puerro hasta que las veamos crujientes.
En el mismo aceite freímos las rodajas de berenjena, una vez fritas las colocamos sobre papel absorbente para que suelten el exceso de aceite.
Colocamos las hojas de lechuga sobre la fuente de servir, de forma decorativa, y encima por la parte central añadimos el maíz, el queso fresco en dados, las rodajas de berenjena, las aceitunas negras y rematamos colocando por encima las tiras crujientes de puerro.
Salamos al gusto, rociamos con aceite de oliva virgen extra y salpicamos con unas gotas de vinagre.
Si os apetece ver el resto de recetas participantes en este reto aquí os dejo el enlace
Fuente: este post proviene de La cocina de Catina, donde puedes consultar el contenido original.
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