Los polvorones son sin duda mi dulce favorito de la Navidad. Soy "ciego" a estos dulces. Me encanta aplastarlos con la mano y si van en bolsa... aplastarlos hasta que se rompa la bolsa. ¡Es una adicción casi! El año pasado ya preparé polvorones de canela y de cacao y por eso este año me he animado con los de limón.
¿Qué tal van las Navidades? Espero que no estéis pecando mucho en las comidas... Bueno, qué leches, ¡espero que lo estéis haciendo a lo grande! Yo la verdad es que igual me estoy pasando un poco, pero bueno, ya llegará el momento de arrepentirse... en unos días. Hasta entonces seguiré sin privarme de un trocito de turrón o un polvorón, o un nevadito... ¡Me encanta!
Como dicen unas amigas mías: "el año nuevo empieza después de Reyes, no puedes plantearte ponerte a dieta antes". Y en verdad, algo de razón tienen, ¿no creéis? ¡Para qué ponerte ya a dieta y no poder disfrutar del roscón de Reyes! ¡Es una locura! Pero bueno, cada uno que haga lo que le apetezca... Yo seguiré comiendo dulces unos días más. Dulces como estos polvorones que espero que los probéis en casa... ¡Os van a encantar!
Polvorones de limón
Dificultad: Fácil
Tiempo horneado: 15 mins (aprox)
Raciones: 45 polvorones (más o menos)
Etiqueta: Aperitivo Dulce
350 gr de harina (325 harina tostada)
100 gr de almendra molida
150 gr de azúcar glacé
180 gr de manteca de cerdo
Dos cucharaditas de zumo de limón
Ralladura de medio limón
Mezcla de cereales (sésamo, pipas...)
- Comenzamos el día anterior poniendo en la bandeja del horno la harina junto con la almendra molida. Vamos a tostar la harina. Se puede comprar tostada, pero es más divertido hacerla nosotros. Al tostarla pierde peso, por eso os he puesto la cantidad reducida si utilizáis ya tostada.
- La metemos al horno precalentado a 150ºC durante 30 minutos. Cada diez minutos (o incluso menos) con una cuchara removemos para que se tueste toda la harina y almendra.
- Dejamos enfriar durante toda la noche.
- En un bol amplio colocamos la harina y la almendra como si fuese un volcán y echamos la manteca de cerdo, el azúcar glacé, el zumo de limón y la ralladura. Amasamos con las manos hasta formar una masa homogénea, arenosa, con la que podamos hacer una bola.
- Envolvemos la bola en papel film y la metemos en la nevera durante una hora.
- Pasado ese tiempo la sacamos y le quitamos el papel film. La aplastamos con la mano ya que con el rodillo es mas difícil. Vamos aplastándola hasta que se quede de un centímetro más o menos. Los bordes se irán abriendo, es normal.
- Con un cortador vamos cortando polvorones y los colocamos sobre una bandeja de horno cubierta con papel de horno.
- Utilizamos los restos formando una bola y empezando de nuevo, hasta que no quede masa.
- Metemos las bandejas en el frigorífico y dejamos reposar 20 minutos. Las metemos para que cuando los horneemos no pierdan la forma.
- Espolvoreamos con unos pocos cereales.
- Precalentamos el horno a 180ªC.
- Metemos la bandeja a altura media y horneamos durante 15 minutos, vigilando que no se nos quemen. Se deben tostar los bordes ligeramente.
- Dejamos enfriar y decoramos con azúcar glacé.
- Servimos en frío. Podemos envolverlos en papel de seda, como si fuese caramelos.
¡A disfrutar!