El otoño es época de platos tradicionales, cocina reconfortante de la de toda la vida, como estos filetitos rusos en salsa. Una receta que seguro todos habéis comido en casa; ya sea con vuestras madres o con vuestras abuelas ;)
La receta de filetes rusos es muy sencilla. Mezclamos la carne picada con ajo, perejil, huevo… y le damos forma. A continuación pasamos los filetitos por harina y los freímos. Luego hacemos la salsa con caldo de carne y harina y dejamos cocer los filetes rusos en ella para que se empapen bien y cojan sabor.
Los filetes rusos yo los he hecho sólo con carne, pero es muy común mezclar la carne con miga de pan mojada en leche. De esa forma quedan mucho más tiernos y jugosos. Os lo recomiendo.
Filetes rusos en salsa
Servings: 4 raciones
Time: 40 min.
Difficulty: media
Ingredientes:
500 gr. de carne picada de ternera
500 ml. de caldo de carne
100 ml. de agua
1 huevo
2 dientes de ajo
Medio vaso de vino blanco
Harina
Perejil fresco
Pimienta
Aceite de girasol o de oliva (para freír)
Sal
Cómo hacer filetes rusos en salsa:
Para preparar los filetes rusos mezclamos la carne picada, el huevo, el perejil y los dientes de ajo picados muy finos, y salpimentamos al gusto. Amasamos bien un tenedor.
A continuación, con las manos vamos formando los filetes finitos y pasándolos por harina.
Con todos los filetes listos los freímos en una sartén con aceite hasta que estén dorados por ambas caras. Los reservamos en un plato.
En la misma sartén, ponemos un par de cucharadas de aceite a calentar y añadimos dos cucharadas de harina para formar una roux, a la que vamos añadiendo poco a poco el vino blando, el agua y el caldo de carne, removiendo constantemente hasta que tenga cuerpo y se forme la salsa.
Una vez lista, incorporamos los filetes rusos y dejamos cocinar a fuego lento unos 15 minutos.
Si vemos que la salsa se ha reducido mucho, lo podemos solucionar añadiendo más agua.
Degustación:
Estos filetes rusos en salsa son estupendos para una comida en familia, acompañados de un poco de arroz blanco con la salsita son deliciosos. O para cenar con un poco de ensalada.