Las castañas para mi representa el otoño. Un fruto de temporada que me encanta y con el que tengo una relación muy particular, ya que hasta mi hijo nació con un antojo, y tiene una castaña en su pierna. No me enrollo más y deciros que este flan está buenísimo. Que lo hagáis, y ya me diréis si llevo razón!!
350 gramos de castañas.
600 ml. de leche.
4 huevos grandes.
200 gramos de azúcar.
Una cascarita de limón y canela en rama( opcional)
Para hacer el caramelo: 5 cucharadas de azúcar y 3 de agua (se puede poner de bote)
En primer lugar vamos a preparar las castañas, (esto parase que es lo más engorroso. Pero haciéndolo bien, no cuesta tanto trabajo, y la verdad por el resultado merece la pena hacerlo)
Hacer un corte a cada castaña y ponerlas al fuego en un cazo con agua que las cubra completamente. Dejar hervir durante 10 minutos. Retirar del fuego.
En cuento las castañas se enfríen un poco para poder manipularlas sin quemarnos pelar las castañas con ayuda de un cuchillo pequeño y de los dedos, eliminando completamente la pielecilla interior. Creerme salen bastante bien!!. Es importante pelarlas mientras están calientes porque de esta forma la piel interior se desprende con facilidad.
Poner las castañas en trocitos pequeños en un cazo y añadir 300 ml. de leche, 100 gramos de azúcar, el palito de canela y la corteza de limón. Poner al fuego y dejar cocer a fuego lento durante unos 20 minutos, hasta que las castañas estén tiernas.
Mientras que se cuecen las castañas se prepara la flanera o flaneras pequeñas con el caramelo. ( yo he utilizado dos diferentes, pero os aconsejo que sean lizas, quedan mucho mejor)
Poner al fuego un cazo con las 5 cucharadas de azúcar y 3 cucharadas soperas de agua. Dejar al fuego sin remover hasta que tenga un tono dorado. Entonces apartamos del fuego y removemos con una cuchara de palo.
Verter el caramelo en la flanera y moverla bien para cubrir el fondo y parte de las paredes.
Si empleamos caramelo comprado simplemente lo ponemos en la flanera y se reparte bien por el fondo y la mitad de los laterales.
Precalentar el horno a 180 grados.
Cuando están cocidas las castañas, retiramos el palito de canela y la corteza de limón. Se trituran las castañas con la batidora hasta obtener una crema lisa y sin grumos.
Poner en un recipiente la leche restante 300 ml, los otros 100 gramos de azúcar, los huevos y batir bien, luego ponemos la crema de castañas. Batir con unas varillas o con la batidora hasta que la mezcla sea uniforme.
Verter la mezcla en la flanera caramelizada.
Ponemos el flan o flanes, en un recipiente con agua al baño Maria en el horno.
Hornear durante 50 minutos, hasta que esté cuajado. Comprobamos con una aguja de punto o un cuchillo fino hasta ver que sale limpio. De todos modos si el flan está cuajado pero le queda todavía un poquito en el centro bastará con dejarlo un rato más dentro del horno apagado.
Sacar del horno. Cuando se enfríe completamente y ponerlo en el frigo. Como todos los flanes está mejor de un día para otro.
Para servir pasar un cuchillo por el borde de la flanera y volcarlo sobre un plato.
Yo lo he decorado con castaña con chocolate y cerezas confitadas, pero os lo dejo a vuestra elección…Sobre gustos no hay nada escrito!!!.
Ahora toca disfrutar de este delicioso flan , que seguro os va a encantar!!!
Fuente: este post proviene de Las dulces tentaciones de Marlen, donde puedes consultar el contenido original.
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