El flancocho es un postre entre flan y bizcocho típico de la cocina latina, en concreto de puerto rico. Es un postre delicioso que se elabora con leche condensada, leche evaporada y queso crema, aunque hay varias versiones de este postre y se puede personalizar, sobre todo con el bizcocho que empleemos. En nuestro caso hemos hecho una versión con un poco mas de queso crema del que se suele utilizar y con un bizcocho un poco mas denso.
Otra de las variaciones es que hemos empleado miel en lugar de caramelo, pero por una cuestión de falta de azúcar para hacerlo, aunque el resultado con la miel ha sido riquísimo. Como suele suceder con los postres que llevan queso este flacucho de queso está mejor aún cuando se ha enfriado bien y ha reposado unas horas, aunque está tan bueno que resulta difícil esperar.
Flancocho de queso
Ingredientes
350 g de leche condensada
350 g de leche evaporada
350 g de queso crema tipo philadelphia
6 huevos XL
150 g de azúcar
100 ml de aceite de girasol
100 g de harina de trigo leudante o bizcochona
100 g de fécula de maíz o maicena
caramelo líquido o miel
Preparación del flancocho de queso:
Primero vamos a preparar la masa del bizcocho, en un bol ponemos tres de los huevos, el azúcar, el aceite de girasol y lo mezclamos con unas varillas. Entonces añadimos la maicena y la harina de maíz, si no tenemos harina leudante o bizcochona, utilizamos harina normal y añadimos media cucharadita de levadura (polvos de hornear). Lo mezclamos bien y lo dejamos reposar mientras preparamos el flan.
En otro bol ponemos los otros tres huevos, la leche condensada, la leche evaporada, el queso crema y lo batimos con una batidora para que no queden grumos del queso.
En cuanto al molde podemos utilizarlo con la forma que queramos, en este caso lo hemos empleado tipo savarín, con hueco en el centro. Vamos a poner en el fondo del molde caramelo líquido o unas cucharadas de miel. Echamos primero la masa del flan y luego la del bizcocho, procurando echarla de forma que quede repartida pero no vamos a moverla, vamos a ver que se va al fondo pero eso es normal.
Lo metemos al horno precalentado a 160º y al baño María, es decir dentro de otro recipiente con agua, no poner demasiada agua, hasta no mas de la mitad del recipiente, para que no se desborde cuando comience a hervir.
Lo dejamos de 50 a 60 minutos, el tiempo va a depender mucho de nuestro horno, a partir de los 50 minutos comprobaremos como está pinchando el bizcocho por la parte de dentro, si la aguja o el cuchillo que utilicemos sale limpio ya podemos apagar el horno.
Lo dejaremos unos diez minutos dentro del horno con la puerta cerrada y otros diez minutos con la puerta abierta para evitar un cambio muy brusco de temperatura, entonces lo sacamos, lo dejamos sobre una rejilla y esperamos a que se temple. Una vez esté templado lo metemos a la nevera hasta que se haya enfriado del todo, entonces ya lo podemos desmoldar y servir.
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