Buenos días, ¿qué tal ha ido la semana?
Yo he seguido horneando, el jueves fue el cumpleaños de mi madre y como es habitual en los últimos años le preparé la tarta de cumpleaños. Aunque los bizcochos los preparé el día anterior la crema y el merengue lo preparé el mismo día mientras mi padre hacía el risotto que íbamos a comer. En esos momentos en los que te juntas dos personas en la mini cocina de mis padres echo de menos la cocina que tenía en el último piso de Barcelona. Aunque sólo tenía dos enchufes tenía mucha encimera así que nunca nos molestábamos cocinando.
Mi madre y yo solemos ver, cuando no hay nada más en la televisión, los programas de Divinity de reformas y aunque nos reímos mucho cuando empiezan a tirar paredes, y con qué facilidad las tiran, para hacer espacios abiertos cuando nos agobiamos con la mini cocina que tenemos ya empezamos a soñar cómo reformaríamos la casa para que fuera más grande. Aunque la última conclusión que sacamos es que nos sale más rentable comprar un terreno para construirnos una casa a medida, que por cierto ya tenemos diseñada, para tener una cocina grande donde mi padre pueda cocinar y yo hacer repostería.
Y así van pasando los días y ya se acerca el momento de mudarme a Londres, el sábado ya estaré montada en el avión cambiando una isla por otra.
Después del Bundt Cake de la semana pasada hoy os traigo una receta un poco más ligera y que en casa nos encantó. En el blog tengo otras dos recetas de galletas con avena, estas Galletas de Avena y estas Galletas de Avena y Chocolate y esta la veía un poco rara, pero tengo que admitir que está muy buena. Las galletas quedan muy crujientes y al saber que son más sanas no tienes remordimientos por ir picando en la cocina. Además son muy fáciles de hacer.
La receta está adaptada de estadel blog Delantal de Alces.
Ingredientes (10 unidades)
115 g de copos de avena
130 g de harina
90 g de azúcar moreno
100 g de aceite de oliva
40 ml de agua
7 g de levadura
Pizca de sal
Precalentamos el horno a 180º
Mezclamos todos los ingredientes secos.
Añadimos el aceite y el agua. Mezclamos bien.
Hacemos bolitas y las aplastamos en una bandeja con papel vegetal.
Horneamos 20 minutos.
Espero que os gusten y nos vemos el lunes con otra nueva receta. Feliz semana :)
Fuente: este post proviene de Repostería Tximeleta, donde puedes consultar el contenido original.
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