La base de un buen desayuno, saludable y equilibrado, son los cereales y la fruta. Estas galletas nos aportan estos dos ingredientes, al estar hechas principalmente con avena y plátano. Junto con un vaso de leche vegetal (de soja o almendras, por ejemplo), serán un desayuno perfecto para cualquier día
Además, la avena es un ingrediente súper bueno que puede ayudarnos mucho tanto con nuestra dieta como con nuestra diabetes (puedes leer más en el artículo Avena y diabetes).
Estas galletas de avena y plátano quedan blanditas, no son unas galletas que queden súper crujientes precisamente, pero están muy buenas. Si queréis que queden crujientes, lo que yo hago es primero tostar la avena en una sartén con una nuez de mantequilla light, hasta que se dore, y hacerlas más finas (cuanto más gruesas, más blanditas serán). Así le daremos un toque diferente y más crujiente.
Podéis hacer las variaciones que queráis: con trocitos de chocolate, nueces, otros frutos secos, semillas… ¡imaginación al poder!
Si las queremos conservar más tiempo, lo suyo es guardarlas en una cajita metálica en la nevera. No obstante, como todo, es mejor si nos las comemos el mismo día. Como se hacen muy rápido, es bastante factible que las hagamos a menudo en tandas pequeñas en lugar de hacer muchas de golpe, para evitar que se queden reblandecidas.
Información Nutricional
Cada galleta de avena y plátano sin azúcar contiene:
28,4 kcal
4,1 gr HC
La ración recomendada es de 2 galletas.
Ingredientes:
75gr de copos de avena, 30gr de harina de almendra (almendra molida), 2 plátanos maduros
Instrucciones:
Como el procedimiento es rápido, empezaremos precalentando el horno a 180º.
Pelamos los plátanos, los troceamos y los ponemos en un bol. Con la ayuda de un tenedor, los chafamos bien hasta tener un puré. Si tus plátanos no están muy maduros y te cuesta, puedes usar la batidora para ayudarte a hacer el puré-
Añadimos la harina de almendra y la avena poco a poco, integrándola bien con una lengua de gato hasta conseguir una pasta homogénea. Añadimos la canela y mezclamos bien. Si queremos darle un toque especial, podemos añadir canela, trocitos de chocolate, frutos rojos, arándanos, etc.
Cubrimos una bandeja de horno con papel de hornear (papel manteca) y vamos formando las galletas encima, de tamaño pequeño-medio y aplanándolas bien.
Horneamos a 180º durante unos 15 minutos, hasta que veamos que se doran por encima.
Dejamos enfriar sobre una rejilla, servimos, ¡y listo! Sientan de muerte acompañadas de alguna bebida de chocolate (yo me hago una con soja).
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Fuente: este post proviene de Dulces Diabéticos, donde puedes consultar el contenido original.
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