Hace unos días publiqué una receta, yogur griego casero. No es que el yogur no estuviera de vicio sólo, con fruta o cereales, todo lo contrario, pero me apetecía utilizarlo para algo de repostería. De esa idea salieron estas galletas de chocolate y yogur griego.
Resultaron unos pequeños bocados de textura abizcochada con un intenso sabor a chocolate, perfectas para un capricho a media tarde con un cafecito.
Su elaboración es muy sencilla, lo único que debemos de tener en cuenta es que, es importante no hornearlas en exceso para evitar que se queden un poco secas en su interior.
Yo he utilizado el yogur griego que ya había preparado en cada, pero si utilizáis el que podemos encontrar en cualquier supermercado tendremos que aumentar la cantidad de harina y levadura. Esto es porque su textura será mucho más ligera y menos compacta que el yogur preparado en casa. Os dejo la receta por si os animáis a daros un pequeño capricho.
RACIONES: 28 ud.
TIEMPO: 30 minutos
DIFICULTAD: baja
GALLETAS DE CHOCOLATE Y YOGUR GRIEGO:
1 HUEVO
150 gr. AZÚCAR
150 gr. YOGUR GRIEGO
150 gr. HARINA DE TRIGO
125 gr. CACAO SIN AZÚCAR
1 cdita. LEVADURA QUÍMICA
1 cdita. ESENCIA DE VAINILLA
SAL
4 cda. CHIPS DE CHOCOLATE
1.- En un bol batimos el huevo con el azúcar. Trabajamos la mezcla hasta que comience a espumar.
2.- Añadimos el yogur griego y la esencia de vainilla y mezclamos bien. Yo he utilizado yogur griego casero que he tenido 18 horas eliminando su suero, el resultado ha quedado súper compacto y espeso. Si utilizáramos yogur griego comprado tendremos que utilizar más cantidad de harina, ya que es mucho menos denso.
3.- Incorporamos los ingredientes secos la harina, levadura, cacao y una pizca de sal. Mezclamos bien con un tenedor y luego con las manos, hasta conseguir una masa manejable.
4.- Dividimos la masa en porciones de unos 20 gr. cada una y las vamos colocando sobre una bandeja de horno. Distribuimos chips de chocolate sobre cada una de las porciones y, con el horno previamente caliente a 180ºC horneamos durante 8 o 9 minutos.
5.- Retiramos las galletas de la bandeja de horno y las colocamos sobre una rejilla hasta que se hayan enfriado.