Hace un tiempo había hecho una prueba para hacer galletas decoradas con fondant para celiacos, con la misma harina que compro para hacer bizcochos preparé las galletas, los resultados fueron desalentadores, las galletas se rompían con mucha facilidad, era muy difícil trabajar la masa, y lo más importante no había forma de comerlas, se te hacían una masa en la boca que era muy difícil de tragar, supongo que debido a la gran cantidad de harina de maíz refinada que llevan esas harinas.
Había comprado también una harina de maíz amarilla, no la maicena y el otro día a raíz de que viniese una amiga que tiene a su hija y a su sobrina celiacas me acordé del tema y se me ocurrió hacer la prueba con esta harina.
La receta es parecida a la que uso para las galletas normales decoradas con fondant pero con una menor proporción de harina. Como es una prueba solo hemos decorado una pequeña parte y al resto les hemos hecho formas con cortadores. La masa se comporta de maravilla a la hora de hornear, como podéis ver en las fotos las galletas no han perdido la forma, quedan muy chulas y están buenas, no te empalagas con ellas, a mi me han gustado ahora falta que pasen la prueba de los niños.
Ingredientes:
450 gramos de harina de maíz amarilla sin precocinar
250 gramos de mantequilla a temperatura ambiente
200 gramos de azúcar
2 huevos medianos
Una pizca de sal
1 cucharadita de pasta de vainilla
Batimos la mantequilla con el azúcar y con la pasta de vainilla hasta que quede cremosa, añadimos los huevos, primero uno y luego el otro, no añadimos el siguiente hasta que no esté integrado el anterior, cuando los huevos estén integrados añadimos en tres veces la harina con una pizca de sal, no hace falta amasar mucho solo que quede todo bien mezclado.
Hacemos una bola y la envolvemos con papel film, la dejamos en la nevera reposar unas horas, luego la sacamos y la dejamos atemperar un poco para poder estirarla. Hacemos dos partes con la masa y la estiramos entre papel film para que no se pegue al rodillo a unos 0.5 cm de grueso cortamos con unos bonitos cortadores y pasamos a una bandeja de horno con papel.
Horneamos durante 14 minutos en el horno previamente calentado a 180º C, están listas cuando se empiezan a tostar por los borde, dejamos enfriar un poco en la bandeja y luego pasamos a una rejilla para que se terminen de enfriar.
Para decorar con fondant tenemos que asegurarnos de que es sin gluten, para pegar el fondant usaremos sirope de maíz Karo que es sin gluten.