He de reconocer que en realidad el título tiene trampa, porque ninguna galleta debe hacerse sin dejar reposar la masa al menos un par de horas en el refrigerador.
Pero si tenemos la masa estirada y refrigerada, os aseguro que en menos de cuarenta minutos podemos tener unas cuantas de estas monadas listas.
La primera parte es efecto crackle o craquelado, cuya técnica debo enteramente al fantástico blog de Verónica Castañon, Con azúcar y algodón. En el enlace podéis aprender a hacer este efecto, que es muy sencillo y básicamente consiste en pintar la superficie de la galleta cruda con colorante en polvo diluido en vodka, y hornearla a una temperatura algo menor de la habitual.
Como de la experiencia se aprende, para la próxima vez pienso utilizar una capa más finita de pintura -así el craquelado será más pequeño y delicado- y la aplicaré dando las pinceladas siempre en el mismo sentido -para que quede más bonito-.
Mientras horneamos, podremos ir preparando la segunda parte de la galleta: las flores. Se pueden hacer con cualquier material, pero sin duda lo más rápido es emplear un poco de pasta de goma o gum paste y un buen molde de silicona. Poniendo un poquito de verde para hacer las hojas y el color que queramos para las flores, en menos de dos minutos tendremos nuestras flores listas.
Al sacar la galleta del horno veremos que, conforme se enfría, el aspecto del craquelado cambia a mejor. Cuando la galleta esté fría, podremos pegar nuestras flores con un poquito de icing que tengamos por ahí o con una gotita de piping gel.
Y por último, completaremos el look de la galleta con un poco de oro; yo utilizo colorante en polvo dorado viejo mezclado con unas gotitas de vodka. Primero podemos hacer unas marcas con el mismo cortador y un rotulador alimentario para que quede perfectamente circular.
Luego hay que pintar de dorado con mucho cuidado el lateral de las hojas y la línea del borde de la galleta.
Y ya está. En esta galleta no hay trabajo de icing, el único secreto para que salgan bien es hacer una masa bien rica y conocer nuestro horno para lograr el craquelado.
¡Probad a hacerlas! No importa que no tengáis experiencia galletera, os van a quedar estupendas. Y si os animáis no dejéis de enviarme vuestras fotos a mi facebook o por mail. A los que dedicamos tiempo a un blog nos encantan vuestros comentarios; ¡saber algo más de los que leéis desde el otro lado!
Para hacer estas galletas decoradas necesitaremos:
–Masa de galletas
-Un cortador redondo
-Colorante en polvo blanco y dorado
-Vodka blanco o ginebra para diluir el color
-Un molde de silicona para hacer flores
-Pasta de goma o gum paste
-Un poco de icing o piping gel para usar como pegamento
-Pinceles