Estoy a tope.
Casi no me da la vida para hacer todo lo que me gustaría. Ya han llegado los exámenes y ando estudiando muchísimo. Para los que no lo sabéis: estoy estudiando segundo de Estudios Ingleses (lo que antes era Filología Inglesa) a través de la UNED. La verdad es que primero me fue bien (no perfecto) y espero que segundo me vaya mejor. Estudiar, estoy estudiando, pero algunas asignaturas son insufribles.
Estudiar en inglés tiene sus dificultades, obviamente, sobre todo cuando tienes que analizar textos imposibles que no sabrías ni hacerlo en castellano. Pero bueno, el estudio se hace más llevadero cuando llegas al frigorífico y te encuentras algo rico (y sano) con lo que matar el gusanillo.
Sí. Soy de esos a los que en épocas de exámenes no me pica el gusanillo, sino toda la plaga de gusanos. Podría comerme un elefante a deshoras... ¡y ya no te digo en las comidas! Estoy controlándome: me gustaría salir por la puerta para el último examen, no por el garaje.
Así que en los pocos momentos libres que tengo estos días me dedico a hacer recetas sanas con las que poder engañarme un poco. No quiero ser un infeliz estudiante sino que quiero permitirme algún capricho delicioso de vez en cuando. Con ese objetivo surge la idea de esta gelatina acompañada de yogur, un aperitivo perfecto para merendar o almorzar (o remerendar, o realmorzar... ¡claro!).
Hoy he hecho mi primera prueba, era una prueba calificable online, no un parcial, a esos me enfrento la semana que viene. Ya os iré contando, pero la primera impresión es que voy bien... ¡habrá que hacer más de estas para ver si surten efecto! ¡Os dejo la receta para que la probéis vosotros mismos!
Gelatina de frambuesas naturales con yogur
Dificultad: Fácil
Raciones: 4
Etiqueta: Aperitivo Dulce
150 gr de frambuesas
3 frambuesas por vasito para decorar
Dos yogures naturales sin azúcar
10 gr de gelatina neutra en polvo
350 ml de agua
- Comenzamos triturando bien las frambuesas. Podemos hacerlo con la batidora manual tranquilamente. Yo no las he colado, he dejado que las pepitas se queden para que no perdamos la esencia de las frambuesas.
- Calentamos el agua en una cacerola, hasta que esté a punto de hervir.
- Mezclamos entonces la gelatina en polvo con el agua y la disolvemos bien, hasta que desaparezca.
- Antes de que hierva añadimos las frambuesas trituradas. Damos vueltas hasta que esté todo bien mezclado.
- Disponemos la mezcla en vasitos, llenándolos hasta la mitad.
- Dejamos enfriar en el frigorífico al menos dos horas.
- Cuando haya pasado el tiempo, batimos bien dos yogures y los añadimos sobre los vasitos. Yo he usado uno para cada dos vasitos.
- Decoramos con frambuesas.
- Servimos en frío.
¡A disfrutar!
- Podéis añadir dos cucharadas de azúcar al agua caliente y dejar que se disuelvan si queréis que el postre sea más dulce.
- En vez de gelatina en polvo podéis utilizar hojas de gelatina (recordad que seis hojas de gelatina equivalen a 10 gr de gelatina en polvo). Para utilizar las hojas, debéis hidratarlas en agua fría durante 5 minutos, más o menos, y después añadirlas bien escurridas al agua caliente para que se disuelvan.
