Bueno pues el otro día le vi este guiso y me puse enseguida manos a la obra porque los ingredientes me encantan y también porque mi madre siempre dice que mi abuela hacía un guisado con sepia que estaba muy bueno y la verdad es que éste nos gustó mucho.
Ahora que las alcachofas están de temporada es ideal. La sepia me gusta comprarla fresca y que me la limpien porque sale más tierna que la que está ya limpia. Y el pimiento me gusta ponerlo de bote porque no te encuentras luego pieles por el guiso, cada uno tiene sus manías je, je.
Ingredientes:
1 sepia grande.
4 patatas.
1 cebolla.
1 chalota o la parte blanca de 1 puerro.
1/2 bote de pimientos de piquillo a tiras.
4 alcachofas.
1 rebanada de pan.
1 ajo.
8-10 almendras.
perejil.
Empezamos pelando y cortando las patatas chascándolas para que luego suelten el almidón y espesen el caldito y las dejamos en agua.
Limpiamos las alcachofas y las partimos en 6 u 8 trozos según lo grandes que sean y vamos echándolas a un recipiente con agua, se les puede añadir limón o perejil para que no se oscurezcan.
Cortamos pequeñito la cebolla, la chalota (o un poquito de puerro también le queda bien) y las tiras de pimiento. La sepia le pedimos a nuestro pescadero de confianza que nos la limpie y trocee y así una cosa que tenemos adelantada.
Ponemos la olla exprés al fuego con un chorretón de aceite de oliva, más o menos justo que cubra el fondo, y vamos a freír el pan, el ajo y las almendras para hacer la picada que añadiremos al final, lo sacamos al mortero.
Cuando retiramos lo de la picada, en el mismo aceite añadimos la cebolla y la chalota para que se rehoguen, cuando se vean transparentes añadimos el pimiento y rehogamos unos minutos. Salpimentamos. Añadimos la sepia y le damos unas vueltas.
Seguidamente ponemos las alcachofas bien escurridas, añadimos agua y cuando comience a hervir ponemos las patatas. Cuando hierva se prueba y se rectifica de sal si hace falta. Tapamos la olla y cuando empiece a salir el vapor contamos 20 minutos.
Mientras cortamos el perejil y lo añadimos a lo que teníamos en el mortero y se prepara la picada para añadirla cuando abramos la olla.
Cuando pasen los 20 minutos abrimos la olla añadimos la picada y vemos cómo está de caldo, si hay demasiado podemos poner la olla a fuego fuerte y destapada para que evapore y reduzca el caldo. Si por el contrario veis que le falta se puede añadir un poco de agua y levantar el hervor.
Y ya tenemos un plato de cuchara riquísimo y sano, espero que lo probéis y lo disfrutéis.
Bye.