Durante los últimos años hemos comprobado que la quinoa iba tomando protagonismo en nuestra dieta, y no es para menos ya que se trata de un superalimento por sus múltiples beneficios nutricionales:
Tiene un alto contenido en minerales como el fósforo, el potasio, el magnesio y el calcio
Es rica en vitaminas del complejo B, C y E
Es rica en aminoácidos, buenos para el desarrollo cerebral
Nos aporta proteínas
Nos aporta fibra
Es rica en Omega 6
Presenta un índice glucémico muy bajoY para esta ocasión he usado la quinoa para preparar una deliciosa hamburguesa muy sana, acompañada de tomate, aguacate y mostaza.
INGREDIENTES (Salen ocho hamburguesas):
Para las hamburguesas:
250 gr. de quinoa
500 ml. de caldo de pollo
2 chalotas
1 diente de ajo
1 cucharadita de jengibre en polvo
3 cucharadas de harina de garbanzos
Perejil fresco
Copos de avena
1 huevo
Sal
Pimienta
AOVE
Para acompañar:
Panecillos de hamburguesa (si queréis hacerlos caseros podéis usar esta receta que os dejé hace ya tiempo en el blog)
Canónigos
Tomate
Aguacate
Mostaza (podéis encontrar la receta de la mostaza casera en el mismo post de los panecillos de hamburguesa que os dejo más arriba).
PREPARACIÓN:
Ponemos a calentar el caldo de pollo en un cazo y añadimos la quinoa, removiendo de vez en cuando. Dejaremos hasta que ésta se hidrate y se consuma el caldo casi en su totalidad. Retiramos entonces del fuego y añadimos la harina de garbanzos. Añadimos también las chalotas y el ajo picado, el jengibre molido, la sal, la pimienta, el perejil picado y, por último, el huevo batido. Mezclamos todo bien y dejamos reposar la mezcla en la nevera por lo menos una hora.
Pasado este tiempo vamos cogiendo bolas de masa y aplastando con la ayuda de la mano. Y vamos rebozando con los copos de avena. En una sartén o plancha ponemos un fondo de AOVE y vamos cocinando las hamburguesas unos minutos por cada lado hasta que estén doradas.
Preparamos la hamburguesa abriendo el panecillo en dos, ponemos canónigos, una rodaja de tomate primero. Después añadimos la hamburguesa, encima ponemos unas rodajas de aguacate y terminamos con una cucharadita de mostaza. Tapamos con la otra mitad del pan y servimos.
Sin duda una opción muy sana para ir introduciendo en niños la quinoa. Ya veréis qué buenas están. Y si queréis podéis encontrar un montón de recetas con quinoa en este enlace.
Feliz lunes.