Este verano estoy utilizando la heladera casi todas las semanas, hace tanto que calor que los helados vuelan enseguida, no os ha pasado que vais a coger un helado del congelador y ya no quedan? pues a mi continuamente, menos mal que en un momento, me pongo y lo hago.
Yo prefiero hacer helados nuevos, pero en casa siempre me piden los que ya conocen y que les gustan, sobre todo el helado de mantecado que es el preferido de todos, y como luego, suelo hacer leche merengada con las claras que me sobran.....ya los tengo felices!!
Desde hace días que mi marido no para de pedirme que le haga helado de fresas, le digo que no es fácil encontrarlas ahora, pero el otro día fuimos a Makro y como allí hay de todo, las compramos y aquí está este riquísimo y sabroso helado de fresas.
Para hacer este helado buscaba una receta fácil y rápida y la verdad es que no puede ser más sencilla.
Casi todos los días por la tarde tarde, mi amiga Merche de Hogar y brasas y yo salimos a pasear por la playa, y el día que compré las fresas le comenté lo de hacer un helado pero que fuera sencillo porque tengo unos amigos que se han comprado la heladera y me han pedido que publique helados fáciles, sin cocina.......y ahí está Merche con sus buenas recetas y me dice que este helado solo lleva tres ingredientes, fresas, leche condensada y leche natural, decidido y hecho!!!
Para hacer el helado un poco más ligero he utilizado leche condensada desnatada y leche natural también desnatada, tiene la misma cantidad de azúcar pero mucha menos grasa.....algo es algo!!!
Ingredientes:
800g. de fresas.
1 bote pequeño de leche condensada desnatada (370g.), o medio de los grandes.
200ml. de leche desnatada.
Modo de hacerlo:
Limpia las fresas quitando las hojas verdes.
Échalas dentro del vaso de la batidora y tritura bien.
Añade por encima la leche condensada y sigue batiendo, echa la leche y comprueba su textura.
Pon la mezcla en una jarra, tapa con film transparente y guarda en la nevera unas horas para que se enfríe bien. Ahora es el momento de mantecar y helar la mezcla para que se forme una crema mas suave.
Saca la cubeta del congelador (recuerda que tienes que tener la cubeta congelada desde el día anterior 24h.), pon las palas de la heladera en la tapa y colócala sobre la base, enciende la heladera.
Cuando las palas empiecen a girar, añade la crema de la jarra poco a poco por la ranura de la parte superior de la tapa sin parar la heladera, así se evita que se forme una crema congelada en la parte inferior de la cubeta.
Deja que se manteque la mezcla unos 30 minutos o hasta que veas que tiene una textura cremosa y que ha aumentado bastante de volumen.
Saca el helado del cubilete y ponlo en un táper o en un recipiente con tapa, sino lo vas a tomar enseguida, guárdalo en el congelador.
Consejos: Cuando termines de utilizar la heladera, limpia el cubilete con agua tibia, sécalo y vuelve a guardarlo en el congelador, así lo tendrás siempre disponible para hacer otro helado.
Puedes sustituir la leche natural por un yogur griego y te quedará muy cremoso.
Recuerda que no debes utilizar nada metálico en el cubilete porque se rallaría, usa cucharas de madera o palas de silicona para sacar el helado.
Puedes hacerlo más o menos dulce añadiendo o quitando leche condensada, eso va a tu gusto.
Lo mismo que añadir o poner menos leche natural para que te quede más o menos espesa la crema.
Cuando sea la temporada de fresas y estén baratas, puedes aprovechar para comprar en cantidad y congelarlas ya lavadas, para hacer helados, mermeladas, postres.....
Espero que te guste.
Fuente: este post proviene de Mandarinas y Miel, donde puedes consultar el contenido original.
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