Parece que este año el verano ha llegado con fuerza y no veas como está apretando el calor, así que he optado por darle caña a la heladera y preparar un delicioso helado para refrescarme.
El helado que os propongo es de naranja y jengibre, todo recubierto de una fina capa de chocolate blanco con trozos de ralladura de naranja y semillas de amapola, es un helado muy llamativo y muy refrescante!
Helado de Naranja y Jengibre con semillas de Amapola
Ingredientes (para 4 helados)
Para el helado de naranja y jengibre
250 gr de leche, 250 gr de nata (crema de leche), 33 gr de azúcar invertido, 8 gr de glucosa, 92 gr de yemas, 125 gr de azúcar, 2 gr de gelatina, ralladura de 2 naranjas y 7 gr de jengibre fresco.
Para el glaseado
350 gr de chocolate blanco, 150 gr de manteca de cacao, semillas de amapola y ralladura de naranja.
Elaboración
Para el helado de naranja y jengibre
Empezamos preparando el helado, en un cazo ponemos a calentar la leche y la nata (crema de leche), cuando llegue a los 90ºC añadimos la ralladura de naranja y el jengibre rallado, retiramos del fuego, tapamos y dejamos infusionar 30 minutos.
Colamos la mezcla y comprobamos el peso (seguro que se habrá evaporado una parte), añadimos un poco más de leche y nata (crema de leche) hasta llegar de nuevo al peso indicado.
Ahora lo ponemos en un cazo junto con el azúcar invertido y la glucosa y lo ponemos al fuego. Mientras se va calentando cogemos un bol y mezclamos las yemas con el azúcar hasta que empiecen a blanquear.
Cuando la mezcla del cazo llegue a los 90ºC retiramos del fuego y la incorporamos a las yemas poco a poco para equilibrar la diferencia de temperatura y removemos.
Pasamos la mezcla de nuevo al cazo y ponemos a calentar a fuego suave procurando que no pase de 84ºC (si pasara de 84ºC el huevo cuajaría) y sin dejar de remover hasta que empiece a espesar ligeramente.
Retiramos del fuego, añadimos la gelatina (previamente hidratada y bien escurrida) y colamos la mezcla.
Preparamos un recipiente amplio con agua con hielo para enfriar rápidamente la mezcla y la vamos removiendo de vez en cuando para que no forme costra, hasta que se enfríe completamente.
Una vez tengamos la crema fría, tapamos con film y dejamos reposar durante 24 horas en la nevera.
Al día siguiente la pasamos por la heladera, cuando el helado este hecho rellenamos los moldes (no olvidarse de poner los palos!), guardamos el resto del helado en un recipiente y lo metemos todo en el congelador.
Montaje
Al día siguiente, preparamos el glaseado, troceamos y fundimos el chocolate blanco junto con la manteca de cacao, y dejamos enfriar hasta los 35ºC, mientras preparamos las semillas de amapola en un bol y también aprovechamos para rallar la naranja.
Cuando la mezcla de chocolate este a 35ºC, desmoldamos los helados, los bañamos con el glaseado y rápidamente esparcimos las semillas de amapola y la ralladura de naranja.
Este último paso de añadir las semillas y la ralladura hay que hacerlo muy rápido porque en cuanto bañamos el helado en cuestión de segundos empieza a solidificar el chocolate, así que lo ideal sería tener las semillas y la ralladura en dos bols pequeños justo al lado de donde bañamos los helados para poder añadirlos rápidamente.