Nesquik de Fresa: Yo no lo había probado nunca y resulta que lo venden en casi todos los supermercados que conozco. Total....que como me falta tiempo para meterme en líos de perolas, lo compré y ahora resulta que no hacen más que ocurrírseme maldades que hacer con Nesquik....¡si yo siempre he sido de salado!
INGREDIENTES
- 100 gr. de Avellanas Tostadas
- 100 gr. de Azúcar Glass
- 100 gr. de Mantequilla
- 100 gr. de Nesquik de Fresa.
ELABORACION
Lo primero que hay que hacer es el Azúcar Glass, yo utilizo un molinillo eléctrico de café para triturar el azúcar, es bastante más barato que comprarla hecha y me aseguro de que es SOLO azúcar, ya que en la mayoría de los casos el azúcar glass que venden está mezclado con harina de maíz y otros aditivos. Así que pasamos el azúcar por el molinillo y reservamos.
Siguiente paso: Elegir las avellanas. Hay que quitar todas las pielecitas oscuras que las recubran, para dejar una crema lo más uniforme posible.
Para moler las avellanas yo lo hice en dos pasos: utilicé primero la picadora de la batidora y después el molinillo de café, así quedan aún más finitas.
Al pasar las avellanas picadas por el molinillo de café, os quedará una masa bastante compacta, ya que las
avellanas soltarán todos sus aceites. Por eso recomiendo triturar primero el azúcar para que no se quede pegada con la grasa de las avellanas en el molinillo. En la foto creo que podréis apreciar bastante bien la textura una vez molidas las avellanas.
Cuando que tengáis los ingredientes bien triturados lo mezclamos todo y a la batidora.
Recordad que, para que no os queden grumos, la mantequilla deberá estar o bien en pomada o (mejor aún) derretida.
Guardamos la mezcla en tarritos individuales en la nevera y cuando endurezca, un par de horas más tarde, ya está lista para untar y disfrutar. A mí me parece que este tipo de preparaciones son geniales para regalar...