La influencia cristiana en la gastronomía española es sin duda muy importante, pero no es ciertamente la única. Hoy en día la mayor parte de España es católica, pero hace muchos siglos, la religión no tenía tanto monopolio como en esta época; y es por ello que además de la influencia cristiana, podemos encontrar rasgos de los judíos y musulmanes.
Cerdo
Los cristianos eran herederos directos de los visigodos, que a su vez eran herederos de los romanos; y esto también es cierto de su gastronomía. De las crónicas de la época sabemos que más o menos hasta el siglo 12 los cristianos normalmente comían una o dos veces al día, y se recomendaba comer y beber con moderación.
El increíble proceso de jamón español fue desarrollado por los cristianos, ya que la carne estaba prohibida para judíos y musulmanes. Cuando se trataba de carne de cerdo, los cristianos tomaron ventaja de todo el animal, nada se desperdiciaba.
La religión sin duda jugó un papel importante en cuanto a gastronomía se trata, sobre todo con la creación de platos específicos para ciertos eventos religiosos y ocasiones. Por ejemplo, hubo una serie de platos especialmente preparados para la Cuaresma (sin ningún tipo de carne) y los domingos, lo que dio paso a una gran variedad de pescados y mariscos, guisos de legumbres sin carne y todo tipo de postres hechos sin el uso de cualquier grasa animal.
Mazapán
También hay muchas tradiciones con respecto a la comida que se consume en Pascua. La sopa de ajo se consume normalmente durante este tiempo, y el bacalao es otro ingrediente principal en muchas mesas españolas; las croquetas son abundantes y los buñuelos hacen una aparición especial.
La influencia cristiana en la gastronomía española también es importante cuando se trata de postres y dulces. Se dice que el mazapán fue creado en Toledo en el siglo 11, inventado por las monjas del Convento de San Clemente en tiempos de hambruna. No había trigo en sus almacenes, pero tenían un montón de azúcar y almendras; y de este modo inventaron el mazapán. Hay una hipótesis que afirma que en realidad fue inventado en Sicilia.
Las monjas inventaron muchos otros postres y pasteles y muchos de esos conventos todavía hacen y venden los mismos postres tradicionales, como “suspiro de monja”, torrijas, rollos de vino y muchas otras delicias.
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Imágenes: hamlovers, mazapanesalguacil
Fuente: este post proviene de Tus Sabores.com, donde puedes consultar el contenido original.
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