Las legumbres son aquellas plantas que dan sus frutos en vainas, como las habas, lentejas, guisantes, garbanzos...
La flatulencia (también denominada meteorismo) se caracteriza por un exceso de gases que se acumula en el intestino y que además de provocar una distensión abdominal (hinchazón del abdomen) causa espasmos intestinales.
Es bien sabido que tras degustar un buen plato de garbanzos o lentejas mucha gente nota hinchazón abdominal, una consecuencia incómoda que hace que las nutritivas legumbres sean rechazadas.
La causa de este exceso de gases la tiene uno de sus componentes: los oligosacáridos no digeribles, en concreto la rafinosa y la estaquiosa. Estos oligosacáridos no digeribles son resistentes al ácido gástrico y a la acción de las enzimas digestivas, y por tanto entran intactos en el intestino grueso y son fermentados por las bacterias que residen en él. Como consecuencia de esta fermentación se forma gas, hecho que explica los problemas de meteorismo y flatulencia que aparecen tras la ingesta de legumbres.
¿Cómo evitar la flatulencia?
Romper el hervor mientras se están cociendo las legumbres, retirando la cazuela del fuego durante unos minutos o bien añadiendo agua fría al agua hirviendo. De este modo se reducen al máximo los oligosacáridos productores de gas. A esto es lo que nuestras abuelas llaman "asustar a las lentejas".
Tomar las legumbres en puré.
Añadir durante la cocción condimentos carminativos como comino, anís, romero, tomillo o hinojo.
Terminar la comida con una infusión digestiva: manzanilla, menta poleo...
Fuente: consumer.es.