LUNES SANTO MALAGUEÑO
¿Que tú no has visto al cautivo
Del barrio la trinidad?
¿Que tú no has visto al cautivo?
Pues yo te voy a explicar
Lo que siente un malagueño
La noche del lunes santo
Viendo al cautivo pasar.
Imagínate un velero
Que se ha salido del mar;
y por las calles navega
Con las velas desplegás.
Y un escalofrió lento
Te va sacudiendo el alma?. (parte del Poema de Isabel Gomez Gallego).
Lunes Santo malagueño, noche de multitudes en las día grande de vivencias para un pueblo que humaniza a su Dios, lo viste de blanco purísimo y mientras camina sobre su trono de caoba y plata llevado a hombros, lo mecen sobre la alfombra de claveles rojos que lleva bajo sus pies, al son del paso marengo de los hombres de trono y todo un pueblo sigue a Jesús Cautivo, el Señor de Málaga.
Y Málaga huele a incienso, a azahar?..
Y en Málaga se une el fervor, el sentimiento religioso y popular, los aplausos y la alegría ante las manifestaciones religiosas, con el recogimiento y el silencio; así el malagueño vive la tradición, eso que llamamos La Pasión de Málaga?.
Tradición que la chiquillería disfruta desde que tiene uso de razón, esperando pacientemente en la calle, pendiente de los nazarenos, de hacer bolas con la cera de las velas, pendiente de esos puestos ambulantes que aún, incluso para los mayores es toda una tentación.
Carromatos de dos ruedas, puestos ambulantes, donde conseguir trozos de cocos bañados con chorritos de agua (difícil de averiguar y casi imposible saber de donde sale esa fuentecita de agua corriente), palodú, cañas de azúcar, alcatufas remojadas, manzanas rodeadas de rojo caramelo enganchadas en un palo, turrones (de vaya a saber Vd de cuando), almendrados de caramelos, altramuces?..
O los puestecitos de almendras fritas?.o el vendedor ambulante vendiendo el ?ricooooo coqui?.
Pero no puedo dejar atrás, el puestecillo de limones ?cascarúos??..con sal o bicarbonato, tan tradicional en la Semana Santa Malagueña.
También llamado limón dulce. Sólo se localiza en las huertas que son regadas por el río Guadalhorce, en la comarca malagueña que toma su nombre.
El limonero fue introducido por los árabes en el área mediterránea entre los años 1.000 a 1.200, siendo descrito en la literatura árabe a finales del siglo XII los cuales han sufrido numerosas modificaciones debidas a la selección natural y a hibridaciones naturales hasta llegar al limón dulce.
Hay referencias de esta variedad de limón en la localidad de Pizarra, ubicada en la comarca del Guadalhorce desde el año 1751.
Es un cultivo característico y muy importante en la provincia de Málaga, pero a diferencia del limón común en esta zona, de sabor fuerte y ácido, el limón dulce no se utiliza en zumos y condimentos sino como postre.
El árbol es de aspecto menos redondeado que los demás cítricos, presenta numerosas espinas, éstas son cortas y fuertes, las hojas son algo más grandes que la de los naranjos y desprenden un característico olor a limón.
El fruto es tipo hesperidio, de aspecto igual al limón estándar llamado así porque la cáscara que lo rodea es más gruesa que la de otras especies, pertenece a la variedad ?Real?, variedad muy antigua y actualmente en regresión.
Al limón ?cascarúo? se le llama así porque tiene la cáscara muy gorda, la gracia y el salero del argot malagueño.
El limón se pela y se le deja parte de lo blanco junto con la pulpa, lo hacemos trocitos y le echamos un poquito de sal, o bicarbonato y ¡a comer!. ¿Se atreven?
Si gusta lo ácido, alucinarán con su sabor.
Son limones menos fuertes que los normales, pero aún así, hay que ser valiente para comerlos. ¿Se animan?
Yo tengo la suerte, de poderlos coger del hermoso limonero de mi querida amiga y vecina Paqui, quien junto con su marido Miguel, cuidan y miman ése limonero que tengo justo enfrente de mi casa, que veo y disfruto cada día...
Mi consejo: No dejen de venir y disfrutar de la Semana Santa Malagueña?probablemente una de los mejores lugares de España para vivir y sentir la Semana Santa.