En un artículo anterior, os hablábamos del riesgo que puede entrañar para la salud seguir una dieta ortomolecular. Hoy, en Cocina Casera, vamos a centrar nuestra atención en otra de las dietas más extendidas entre la población, se trata de la dieta Dukan. Los principios de este régimen han sido formulados por un nutricionista francés cuyos libros sobre alimentación están teniendo gran éxito. A pesar de ello, la dieta Dukan puede ser peligrosa para nuestra salud.
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) cataloga a este régimen como un invento de aquellos que ganan dinero a costa de las personas deseosas de encontrar una solución a esos kilos de más.
El éxito de este método no radica en su efectividad, ni es destacable por sus sólidos principios. La dieta Dukan se ha hecho popular gracias a una estudiada y agresiva campaña publicitaria, en la que desempeñan un papel clave su página web y el apoyo de algunos famosos. Pero, según señala la OCU, lo único que se puede afirmar sobre ella, sin temor a equivocarse, es que es un tratamiento desequilibrado e hiperproteico. La Asociación Española de Dietistas y Nutricionistas la califica, a su vez, de fraudulenta e ineficaz.
En sus primeras etapas de aplicación, se dejan de lado los carbohidratos como el arroz, la pasta, el pan o las patatas, y se anima a la que gente a que lleva a cabo un elevado consumo de proteínas. Con ello, y según su creador, la gente adelgaza porque se movilizan sus reservas de glucógeno y grasas. A pesar de que con dicha dieta se puede perder peso rápidamente, es necesario saber que quien la practique está expuesto a una serie de peligros.
Algunos de los efectos negativos para la salud de este régimen alimentario son:
Pérdida de una gran proporción de masa muscular, lo que hará que nuestra fuerza y salud se vean afectadas
Mal funcionamiento del hígado y los riñones
Estreñimiento
Calambres
Fatiga
Javier Aranceta, presidente de la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria, coincide con la OCU en que estas dietas, que cargan el organismo de proteínas, pueden ser muy peligrosas para la salud. Según Arancena, en casos puntuales estos tratamientos pueden ayudar a bajar de peso, pero siempre que se haga un seguimiento de su aplicación en un entorno médico en el que se pueda llevar a cabo un control adecuado para comprobar que no se está perdiendo más agua de lo aceptable o que los músculos no se están viendo afectados, y, del mismo modo, para poder valorar la necesidad en cada caso de hacer uso, durante la duración del régimen, de determinados suplementos.
Los expertos coinciden en que debemos huir de aquellos regímenes que nos prometen una rápida pérdida de peso, ya que hay que tener en cuenta el efecto rebote que se produce una vez se abandonan. Lo que el usuario debe tener claro es que no existen dietas milagrosas.
La única receta para adelgazar es comer justo lo que nuestro cuerpo necesita y hacer ejercicio. En cualquier caso, quien desee perder peso debe acudir a un especialista en nutrición antes de lanzarse sin paracaídas a una dieta que asegura ser milagrosa.
Imagen: Flickr
Fuente: @elmundo
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