Por fin aterrizo por aquí después de más de un mes bastante liado, con poco tiempo y poca cabeza para concentrarme en hacer platos ricos navideños, otro año será. Me habría gustado proponeros cosas ricas para las fiestas pero no ha podido ser, la vida real manda sobre la virtual y no siempre se puede hacer lo que nos gustaría.
Empezamos el año con nuevas energías, nuevas ideas que esperamos os gusten y algún cambio que iremos haciendo poco a poco. Esperamos que sigáis acompañándonos.
Va la receta de hoy, es una lubina al cava, muy buena y sin grandes complicaciones. Un plato de domingo de presupuesto asequible a no ser que la hagáis con lubina salvaje, entonces si que sería un plato de fiesta con banda de música y fuegos artificiales. Yo la he hecho con lubina de cultivo y me ha encantado.
Va la receta:
Para dos personas
INGREDIENTES:
2 Lubinas de ración en lomos
2 cucharadas de mantequilla
2 cucharadas de aceite
1 cucharada de harina
Caldo de pescado (fumet)
1 vaso de cava
1 yema de huevo
½ limón
ELABORACIÓN:
Igual que en la receta anterior la del pastel de puerro con salsa Aurora, vamos a preparar una velouté, esta vez la haremos con el caldo de pescado y el cava. Es una salsa bechamel hecha con cualquier líquido que no sea leche.
En una sartén ponemos la mantequilla y un poco de aceite, rehogamos en ella la harina y cuando empiece a ponerse dorada vamos añadiendo el caldo, removemos para que no queden grumos. Cuando esté integrada la mezcla y bastante espesa empezamos a añadir el cava poco a poco hasta que nos quede una salsa cremosa, ni líquida ni muy espesa.
Dejamos evaporar el alcohol y cocemos a fuego suave removiendo constantemente hasta que tenga la consistencia que nos guste.
Apartamos del fuego y ponemos unas gotas de limón y la yema de huevo, batimos para que emulsione y reservamos.
Salpimentamos las lubinas.
En otra sartén con poco aceite freímos los lomos de lubina sin hacerlos del todo y los colocamos en una fuente apta para horno.
Precalentaremos el horno a 220º con gratinador.
Salseamos generosamente los lomos de lubina y gratinamos hasta que coja un poco de color y estemos seguros de que esté suficientemente hecho el pescado.
Las he servido solo con unas alcachofas mini salteadas pero las podéis acompañar con patatas panadera ó hervidas, verduritas o cualquier guarnición que os agrade.
¡Está muy buena! Espero que os guste.
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Fuente: este post proviene de Cazuela y sofá, donde puedes consultar el contenido original.
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