Ya empezamos a ver los primeros mangos de la zona en los mercados y fruterías, por lo que ahora toca aprovechar con ellos para cocinar. Creo que os he comentado más de una vez que nunca me como el mango como fruta, pero sí que me gusta cocinado o combinado con otros ingredientes (no se si recordáis unas milhojas de mango y queso de cabra con miel de caña y queso parmesano, ¡wow!). Tampoco es la primera vez que preparo una salsa de mango, ya os enseñaba una con pasta y salmón. En esta ocasión os presento una salsa de mango que acompaña a unas lubinas simplemente cocinadas a la plancha y acompañadas también de unas patatas salteadas. El conjunto se convierte en un plato de lujo, que además hemos acompañado de un vinito blanco del que luego os contaré más detalles.
INGREDIENTES:
1 lubina mediana por persona (las mías pesaban aproximadamente medio kilo cada una)
Para la salsa de mango:
Un mango pequeño o medio si es grandecito
250 ml. de leche evaporada
1 cucharadita de curry
Eneldo fresco
Aceite de oliva virgen extra
Para las patatas salteadas:
Unas cuantas patatas pequeñas
25 gr. de mantequilla
Flor de Sal (la mía era Sal de Ibiza con Hibiscus)
Perejil fresco
PREPARACIÓN:
Primero tendremos que limpiar las lubinas y sacar los lomos. Si no os atrevéis podéis pedirlo al pescadero. En mi caso me las abrió pero no sacó los lomos, por lo que después lo hice yo (no con mucho esmero, todo sea dicho). Reservamos. Mientras, ponemos a calentar un cazo con agua y ponemos las patatas bien lavadas hasta que estén cocidas. Sacamos y dejamos enfriar para poder pelarlas con facilidad.
Preparamos la salsa de mango. Pelamos el mango y cortamos en trozos no muy grandes, salteamos en un poco de aceite de oliva virgen extra. Cuando veamos que casi se deshace el mango añadiremos la leche evaporada, y luego la cucharadita de curry en polvo. Removemos bien y dejamos hasta que se evapore un poco la leche y se espese algo la salsa. Salpimentamos. Sacamos y trituramos con una batidora. Añadimos una ramitas de eneldo y reservamos.
Salteamos en una sartén con un poco de mantequilla las patatas peladas hasta que estén calientes (yo he usado de nuevo la sartén de hierro mineral B. De Buyer que me está dando un resultado extraordinario en diferentes tipos de elaboraciones y que podéis adquirirla en Claudia&Julia a un precio estupendo). Una vez salteadas añadimos un poco de perejil y sal con hibiscus (podéis cambiar por flor de sal).
Mientras salteamos las patatas calentaremos una plancha pincelada con aceite de oliva virgen extra y una vez bien caliente añadimos los lomos de lubina con la piel hacia arriba, cocinamos durante unos minutos y le damos la vuelta para completar su cocción. A la hora de servir le añadimos un poco de sal a los filetes de lubina, acompañamos con la salsa de mango y servimos junto con las patatas salteadas.
Y para beber un vino blanco de las Bodegas Habla , famosas entre otras cosas por su vino tinto Habla del Silencio que ha obtenido numerosos premios. Pues bien esta bodega ubicada en Trujillo (Cáceres) saca por primer vez a la venta un blanco, concretamente un Sauvignon Blanc cuya nota de cata es la siguiente: en vista amarillo oro brillante con matices verdes. En nariz intenso aroma varietal característico del Sauvignon Blanc y en boca se trata de un vino fresco y muy agradable con larga persistencia. Se trata de una botella con una estética muy moderna y elegante donde su tapón de cristal checo reutilizable seduce muchísimo. Un vino que ronda los diez euros, y que he adquirido, como tantos otros que os presento, en El Lugar del Vino de la Costa Tropical donde podéis encontrar vinos que no se encuentran facilmente en otros sitios y adaptados a todos los bolsillos.
Bueno, pues con esta propuesta de plato y maridaje tan interesante os dejo todo el fin de semana, esperando que disfrutéis de él a tope.
Lidia.