Este postre es muy sencillo de hacer. Lo he probado con crema pastelera, nata (crema de leche) y ahora trufa.
Siempre triunfa, además se prepara rápidamente y aguanta en la nevera un par de días.
Yo lo prefiero más para merendar ya que llena bastante.
Lo puedes hacer en raciones individuales o si lo prefieres, tipo tortel.
Está escandalosamente rico. Te animo a que lo hagas. Seguro que te encantará.
INGREDIENTES:
Masa de hojaldre
Trufa
Fresas
Azúcar glas
Cacao puro en polvo
Así lo hice:
Elegí 4 placas de hojaldre y las corté a la mitad.
Salieron 8 porciones
Coloca las placas encima de papel vegetal para evitar que se pegue a la bandeja del horno.
Con un tenedor, pincha el hojaldre
Precalienta el horno a 170º durante 5 minutos y coloca el hojaldre dentro.
Deja unos 15 minutos que suba el hojaldre y dale la vuelta.
Deja otros 10 minutos (dependerá de cada horno).
Cuando los tengas dorados, retira del horno y coloca encima de una rejilla hasta que enfríen.
Con un cuchillo de pan, corta por la mitad cada porción de hojaldre.
Prepara la trufa.
Espolvorea cacao por encima del hojaldre.
Con ayuda de una manga pastelera o directamente con una cuchara, coloca la trufa por encima del hojaldre.
Si te gustan las fresas, coloca encima de la trufa unos trocitos de fresa (las dejé toda la noche macerando en azúcar guardadas en un bol tapado en la nevera).
Espolvorea azúcar glas o cacao en polvo.
Son ideales para merendar.