Parece como si esta tarta se hubiera hecho para celebrar... Para celebrar un 21 cumpleaños, para celebrar que España ha ganado la Eurocopa de basket 2015, para celebrar...
En realidad la preparé este verano, en el mes de julio, y fue una de las dos tartas que llevé al 21º cumpleaños de la hija de mi mejor amiga. Su madre, mi amiga, preparó una fiesta sorpresa y tuve la gran suerte de estar allí y compartir ese momento con ellas.
¡Qué bonitas son las fiestas sorpresa! Cuando no te esperas nada, llegas a casa y te encuentras con todo el tinglado montado. Con tus amigos esperándote... Abres la puerta y todos gritan a la vez ¡¡Felicidades!!
Es un regalo precioso y es que a mi me gustan muchísimo las sorpresas (las buenas claro). Disfruto mucho con los preparativos y por supuesto también me gusta recibirlas. ¿Os acordáis de la tarta sorpresa que me prepararon las niñas el día de mi cumpleaños? ¡¡Qué regalo tan bonito!!
En fin, que como la tarta preferida de la cumpleañera es la carrot cake, me puse manos a la obra y a pesar del calor que hacía, que este año el mes de julio ha sido horroroso, me armé de valor y encendí el horno.
Ya preparé otra carrot cake para su madre. Aquella estaba toda cubierta de crema de queso y con una receta distinta.
Como sabéis las "tartas desnudas" me encantan. Cada vez más. Principalmente por la estética en sí y después porque no llevan tanta buttercream o tanto frosting y no se hacen tan pesadas a la hora de comerlas.
Tienen un aire rústico y a la vez elegante. Estoy completamente de acuerdo con la máxima "menos es más"...
Ingredientes
Para el bizcocho
210 gr. de harina
3 huevos
2 cucharaditas de levadura
185 ml. de aceite de girasol
2 cucharaditas de canela
225 gr. de zanahoria rallada
210 gr. de manzana rallada
180 gr. de azúcar
1 puñado de nueces picadas
Para la crema de queso
125 gr. de queso crema
125 gr. de mantequilla (pomada)
300 gr. de azúcar glacé
2 cucharaditas de extracto de vainilla
Elaboración
Precalentamos el horno a 180º C y engrasamos tres moldes desmontables de 18 cm.
En un recipiente tamizamos la harina, la canela y la levadura. Reservamos.
Pelamos las zanahorias y las manzanas y las rallamos (a mi me gusta que no sea un rallador muy fino para que la zanahoria no quede demasiado fina y le aporte textura a la tarta). Reservamos.
Picamos las nueces en trocitos. Reservamos.
En un recipiente batimos los huevos con el aceite y el azúcar. Incorporamos poco a poco la harina tamizada y mezclamos bien. A continuación añadimos las zanahorias y las manzanas ralladas y revolvemos hasta que estén perfectamente integradas. Añadimos la mitad de las nueces y mezclamos.
Repartimos la masa entre los 3 moldes con ayuda de una cuchara para servir helado para hacerlo a partes iguales y horneamos durante 25-30 minutos o hasta que insertando un palillo, éste salga limpio.
Dejamos los bizcochos en los moldes durante 5 minutos y después los desmoldamos y pasamos a una rejilla para que se enfríen por completo.
Podéis preparar los bizcochos el día antes y una vez fríos envolverlos con papel film para que no se sequen y reservarlos hasta el día siguiente.
Para preparar la crema de queso en el vaso de la batidora tamizamos el azúcar glacé y ponemos también la mantequilla pomada y batimos durante 5 minutos a velocidad alta hasta que la mezcla aumente de volumen. A continuación añadimos el queso y batimos 3 minutos más y llenamos una manga pastelera con la crema.
Para montar la tarta, colocamos el primer bizcocho sobre la bandeja o el cake stand donde vayamos a presentarla.
Con la manga hacemos una espiral de crema de queso, distribuimos unas cuantas nueces por encima y colocamos el siguiente bizcocho. Volvemos a rellenar con la crema de queso y a esparcir algunas nueces y por último colocamos el tercer bizcocho.
Ponemos un poco de crema encima del último bizcocho, la extendemos con ayuda de una espátula. Colocamos el cake stand sobre una base giratoria y con ayuda de la espátula y girando la base vamos haciendo un dibujo en la parte superior de la tarta.
Podemos adornar la tarta con unas nueces enteras o con nueces picaditas esparcidas por encima.
Yo simplemente coloqué unas margaritas y una guirnalda con banderitas, que hice yo misma con unos palitos de brocheta, hilo y unos triangulitos de tela.
Esta receta, con alguna que otra variante, es del programa "Dulces con Alma" de Canal Cocina y tengo que deciros que el sabor es espectacular.
Me atrevería a decir que junto con la tarta que tomé hace dos sábados en la fiesta de cumpleaños de mi amiga y compañera Bea, del blog Corazón de Caramelo, son las dos mejores tartas de zanahoria que he probado hasta ahora (y me quedo tan ancha con esta afirmación).
Sólo me queda deciros que si tenéis alguna celebración a la vista, no lo dudéis ni un momento y preparad una tarta de zanahoria en cualquiera de sus versiones (cubierta, desnuda, con más o con menos crema de queso) seguro que vais a sorprender a todos.
Encantada de veros a todos felices y de que la sorpresa saliera a las mil maravillas.
Yo ya estoy pensando en hacer la siguiente...