Casi dos años desde la última receta… ¡Cuánto ha llovido desde entonces! En sentido literal y figurado ;) Mi princesa G ya es una señorita y aumentamos la familia con nuestro benjamín J. También me dieron la oportunidad de impartir clases (nada que ver con la cocina) y ha sido una experiencia maravillosa que estoy deseando repetir y ojalá pueda ir más allá ;) Aprovecho para agradecer a aquellos que me animastéis ya que fui bastante difícil de convencer…
La verdad es que el blog fue mi hobbie aquellos años, siempre digo que a otros les da por el bricolaje, el tennis o las maquetas y a mí me dio por compartir recetas, aficionarme a la fotografía y buscar tiendecitas con objetos curiosos, telas, etc. para mis escenarios. Pero lo cierto es que esto de ser blogger es muy sacrificado, aunque parezca mentira son horas y horas de dedicación que restamos a estar con nuestras familias, amigos y sobretodo, al menos en mi caso, horas de sueño… Empecé a publicar de pascuas a ramos hasta que tuve que dejarlo porque no le encontraba mucho sentido a publicar cada dos meses, ¡yo si hago algo lo hago bien!!
El caso es que este mundo tiene tantas cosas positivas que ahora vuelvo a cocinar, fotografiar, buscar props, crear escenarios bonitos y a compartir una nueva entrada con vosotros cada semana. Ha sido maravilloso recibir mensajes preguntándome si estaba bien, qué había ocurrido para que dejara de escribir, cuándo tenía pensado volver a publicar recetas, etc.
Sigo intentando que los días tengan más de 24 horas pero hasta el momento no ha ocurrido el milagro, si alguien conoce el secreto ¡¡por favor que me escriba un email y me lo haga saber!!
Vuelvo con energías renovadas y con ideas nuevas, pretendo continuar con mis recetas dulces pero voy a abrir un nuevo apartado en las pestañas superiores con recetas que nos van a sacar de apuros para los que tenemos enanos rondando por casa… En la próxima entrada os contaré más.
Ahora sí, vamos con la receta de hoy unos panecillos de calabaza bastante vistosos para nuestras comidas y fabulosos para las meriendas, ya veréis que fáciles de elaborar y con panificadora ni os cuento, ¡poco más tengo que añadir!
Ingredientes:
300 g de calabaza pelada
20 g AOVE
400 g de harina de fuerza
15 g de levadura de panadería fresca
1 cucharadita de sal
Sal Maldon
OréganoPaso a paso:
1. Lo primero es preparar un puré con la calabaza, para ello troceamos la calabaza en dados no muy grandes y la hervimos en un cazo con agua, unos 10 minutos de cocción serán más que suficientes. Escurrimos y en un bol con un chorrito de AOVE la trituramos con un tenedor. Reservamos y dejamos enfriar
§ Otra opción es poner los dados de calabaza en un bol 5 minutos en el microondas y después triturar con un tenedor.
2. En un bol grande ponemos el puré de calabaza junto con la harina, la levadura desmenuzada y la cucharadita de sal, mezclamos todo bien (puede que sea necesario añadir un poquito de agua, yo siempre añado algo) y pasamos la masa a una superficie enharinada
3. Estiramos y amasamos hasta obtener una masa elástica y suave, dejaremos reposar una hora
4. Ya la masa habrá aumentado su volumen y es el momento de hacer bolitas (con las manos enharinadas es más fácil) del mismo tamaño que iremos depositando sobre una bandeja de horno con papel. Con esta cantidad a mí me salen 16 panecillos
5. Dejaremos que reposen de nuevo para que doblen su volumen, una hora más o menos
6. Una vez que levaron, precalentamos el horno a 200º , los pintamos con cuidado con AOVE y espolvoreamos con sal Maldon y orégano
7. Horneamos 20 minutos o hasta que los veamos ligeramente dorados y dejamos enfriar
En panificadora:
1. Vertemos el puré de calabaza con la harina, la levadura desmenuzada y la cucharadita de sal y programamos en modo masa (1h50)
2. Tras ese levado continuamos con el punto 4 del paso a paso
¡Hasta la semana que viene!
Fuente: este post proviene de Frambuesa y Caramelo, donde puedes consultar el contenido original.
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