Bon appétit amig@s,
Hojaldre y crema pastelera, dos ingredientes básicos de la repostería con los que se pueden preparar infinitas recetas. Me enloquecen y casi siempre recurro a ellos cuando no tengo mucho tiempo y tengo que preparar un postre espectacular y sabrosísimo.
Suelo tener siempre en la nevera masas de hojaldre refrigeradas o congeladas en el congelador (se descongelan fácilmente a temperatura ambiente en un par de horas). Son muy socorridas y se pueden preparar muchísimas recetas tanto dulces como saladas. Eso sí, os recomiendo elegir siempre una muy buena masa de hojaldre, el resultado y éxito de vuestra tarta dependerá de ello.
La Pantxineta es una tarta cubierta de hojaldre y crema pastelera típica del País Vasco creada a principios del siglo XX por la casa Otaegui de San Sebastián que con el transcurso de los años se ha convertido en un postre emblemático de la capital guipuzcoana. Según se cuenta, la dueña de la pastelería, Emilia Malcorra, fue la que le puso este nombre adoptando el nombre del pastel francés “franchi-pan” al euskera.
Ingredientes :
2 masas de hojaldre refrigeradas
Medio litro de leche
4 yemas de huevos
50 gramos de maicena
120 gramos de azúcar
Una cucharadita de esencia de vainilla
1 huevo entero para pintar la masa
Un puñado de almendras filteadas crudas
Vamos a empezar por preparar la crema pastelera : primero calentamos la leche -reservando medio vaso- sin llegar al punto de ebullición.Es en este momento cuando podéis poner un trozo de piel de limón o naranja, un palo de canela… para darle más sabor
Mientras en un bol iremos mezclando bien las yemas junto al azúcar, la esencia de vainilla y la maicena. Diluimos en ello el medio vaso de leche que anteriormente habíamos apartado.
Vertemos suavemente esta mezcla en la leche caliente y no dejamos de remover hasta que la crema espese. Tarda muy poco y apenas empieza a burbujear retirar inmediatamente del fuego. Verter en un bol y dejar enfriar.
Truco: cubrir con un papel film transparente tocando la crema, de esta forma no se formará costra.
Una vez fría procedemos a montar la tarta. Extendemos una masa de hojaldre y vertemos la crema pastelera sin llegar al borde y dejando unos 2 cm libres en todo el contorno. Pintamos con huevo batido esta franja libre de crema y colocamos encima la segunda masa de hojaldre.
Es importante sellar bien los bordes. Yo lo hago presionando primero con un tenedor y luego entrelazando los bordes.
Pintamos toda la superficie del hojaldre y esparcimos un buen puñado de almendras fileteadas crudas encima.
La llevamos al horno precalentado a 190 grados durante aproximadamente unos 30 minutos con calor arriba y abajo.
Una vez hecha, se espolvorea con azúcar glas. Se puede tomar tanto templada como fría.
Crujiente, suave, nada empalagosa y sobretodo riquísima.
¡Un bocado exquisito!
Bon appétit Mama