Quienes me sigáis en Instagram, seguro que ya sabéis algo sobre mi nueva obsesión: los macarons. Ellos son los únicos culpables de que haya pasado una semana desde el último post. Y es que desde que los hice por primera vez, no he podido parar de hornear nuevas recetas y probar con distintos sabores hasta dar con una receta que me convenza de verdad. Sobra decir que aún no la he logrado. Eso sí, cuando la tenga, será fiesta nacional y os prometo que la compartiré con vosotros.
Pero mientras tanto, y entre hornadas de macarons, con un resultado regulero, os dejo con un pastel jugoso, jugoso. Muy rico. Un dulce que estoy segura de que lo haréis en vuestras casas tan pronto como terminéis de leer esta entrada.
Porque entre la masa se reparten unas jugosísimas ciruelas pasas hidratadas en vino dulce. Por encima, finas láminas de pera y una deliciosa salsa de caramelo y canela.
Espero que os guste mucho.
Pastel de ciruelas pasas con salsa de caramelo y canela:
Receta adaptada del coleccionable "Tú también puedes un chef" (entrega 39)
INGREDIENTES
- Para el pastel:
2 huevos
12 ciruelas pasas sin hueso
180g de harina + 2 cucharadas
70g de azúcar
55g de aceite de oliva virgen extra
100mL de nata (crema de leche) líquida para montar (35% m.g.)
8g de levadura química en polvo
100g de vino de Jerez
la piel rallada de un limón
una pizca de sal
1 pera grande, descorazonada y cortada en finas láminas
- Para la salsa:
50mL de nata (crema de leche) líquida para montar (35% m.g.)
1/2 cucharadita de canela molida
60g de azúcar
1 cucharadita de agua
15g de mantequilla
PREPARACIÓN
- Para la masa:
Precalentamos el horno 180ºC.
Comenzamos mezclando en un bol la nata (crema de leche) tibia y el Jerez. Introducimos las ciruelas en la mezcla y dejamos que se reblandezcan.
Cuando las ciruelas están blanditas, las escurrimos (reservando el líquido), las troceamos y las enharinamos con las dos cucharadas de harina.
Por otro lado, batimos los huevos con el azúcar hasta que el compuesto esté blanquecino y haya triplicado su volumen.
Añadimos la harina, tamizada con la sal y la levadura, en forma de lluvia. Y mezclamos con la ayuda de una espátula de goma. A continuación, añadimos el aceite, la nata (crema de leche) con licor y la ralladura de limón. Por último, añadimos las ciruelas, y removemos con mucha delicadeza.
Vertemos la masa en un molde rectangular, cubierta su base con papel vegetal.
Colocamos las láminas de pera sobre la superficie y horneamos 40-45 minutos a 180ºC. Dejamos enfriar antes de desmoldar.
- Para la salsa:
Calentamos ligeramente en el microondas la nata (crema de leche) con la canela. Reservamos.
En un cazo, calentamos el azúcar con una cucharadita de agua hasta obtener un caramelo dorado. Cuando burbujee, añadimos, con mucho cuidado, la mantequilla. Retiramos del fuego y añadimos la nata (crema de leche). Removemos hasta integrarlo todo bien. Dejamos enfriar hasta que adquiera una textura como de salsa espesita, pero que se pueda extender. Si la refrigeráis en la nevera, y se os endurece demasiado, con que la calentéis unos pocos segundos en el microondas, volverá a aligerarse.
Cuando el pastel esté frío, lo desmoldamos, pintamos su superficie con un poquito de mermelada de melocotón o albaricoque y, finalmente, vertemos sobre él esta salsa.
¡¡Un besazo!!
Fuente: este post proviene de Mi recetario por Elena Pilar, donde puedes consultar el contenido original.
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