Perfectamente podemos utilizar melocotones frescos, bien maduros, si estamos en temporada, pero si no es así, la opción de los melocotones en almíbar es perfecta para este pastel . El resultado es un bocado húmedo, jugoso y perfecto para desayunos y meriendas.
RACIONES: 12
DIFICULTAD: baja
TIEMPO: 1,5 horas
PASTEL DE MELOCOTÓN:
385 gr. HARINA
220 gr. MANTEQUILLA
400 gr. MELOCOTONES EN ALMÍBAR
300 gr. AZÚCAR
1/2 cdita. BICARBONATO
1/2 cdita. LEVADURA
1 cdita. SAL
3 HUEVOS
1 cdita. EXTRACTO DE VAINILLA
1 cdita. CANELA EN POLVO
200 gr. NATA (crema de leche)
100 gr. ALMÍBAR DE LOS MELOCOTONES
1.- En un bol mezclamos la harina, la levadura, el bicarbonato, la sal y la canela. Reservamos.
2.- Escurrimos los melocotones del almíbar reservando 100 gr. de este que luego utilizaremos en el pastel. Troceamos los melocotones en dado pequeños y reservamos.
3.- Con la mantequilla blandita, con textura de pomada, la batimos con el azúcar hasta formar una crema blanquecina y espumosa. Yo he utilizado un robot de cocina para esta elaboración.
4.- Añadimos los huevos uno a uno, batiendo bien la mezcla para que se integre antes de añadir el siguiente. Agregamos la esencia de vainilla.
5.- Alternamos la harina con las nata (crema de leche) y el almíbar añadiéndolas por tandas. Primero agregamos 1/3 de la harina y mezclamos, añadimos la nata (crema de leche) y volvemos a mezclar. Continuamos con el segundo tercio de la harían, luego el almíbar y por último lo que nos quede de harina.
6.- Incorporamos los melocotones troceados y mezclamos para que se repartan por toda la masa. Para asegurarnos de que la fruta queda repartida por la masa podemos enharinar los melocotones antes de añadírselos a la mezcla, así no se nos quedarán abajo en el momento del horneado. Este paso yo no lo hice, por eso la mayor parte de la fruta aparece en la parte superior del pastel, lo que era el inferior del molde.
7.- Vertemos la masa en un molde con hueco interior, engrasado con mantequilla por toda su superficie. Si utilizamos un molde liso, podemos forrarlo con papel de horno, así nos aseguraremos que no se quede pegado a las paredes y que su desmoldaje sea fácil.
8.- Con el horno previamente caliente a 175ºC, horneamos el pastel durante 60 minutos con calor por arriba y por abajo, sin ventilador. Comprobamos que el pastel está listo pinchándolo con un palito y comprobando que este salga limpio.
9.- Retiramos el pastel del horno y, sin desmoldar, lo dejamos reposar durante 15 minutos sobre una rejilla antes de desmoldarlo. Se trata de un pastel muy jugoso por eso si lo desmoldamos antes de tiempo corremos el riesgo de que se nos rompa. Dejamos que el pastel se enfríe totalmente sobre la rejilla, una vez desmoldado, antes de servir.
Fuente: este post proviene de Galletas para Matilde, donde puedes consultar el contenido original.
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