La empresa que confecciona estas patatas fritas se llama “Patatas fritas J. García” y nació en Castellón en 1983. Es una empresa absolutamente familiar, dedicada a la elaboración de patatas fritas (“papas”), cortezas, frutos secos y otros productos similares de forma totalmente artesanal, sin aditivos ni colorantes y con una fecha de caducidad muy corta. El matrimonio Javier García y Yolanda Cosín, en la época en la que decidieron montar la empresa, se dedicaban a la elaboración de churros, buñuelos y patatas fritas por métodos tradicionales y los vendían en papelinas en su tienda. Es un poco más tarde, en 1990, cuando debido al creciente aumento de demanda de sus productos, no solo por parte de particulares sino de pequeños comercios, pensaron en elaborar el producto envasado y aumentar los niveles de producción.
Hoy en día continua siendo la calidad el elemento que diferencia a sus productos y es por ello que el matrimonio ha decidido no expandir su negocio y no distribuir sus patatas a grandes superficies, ya que se perdería calidad y su elaboración artesanal se vería perjudicada.
Son las “papas” más conocidas y consumidas en toda la provincia de Castellón. Se venden incluso en el Corte Inglés de Castellón y alguna tienda gourmet o delicatessen de Valencia. Se sirven también en la cafetería del Hotel Voramar de Benicàssim, uno de sus clientes mas veteranos y fieles. De hecho es el aperitivo más servido.
Su producción está integrada en la marca “Castelló Ruta de Sabor” . Castelló Ruta de Sabor, es el mayor escaparate gastronómico de la provincia. Se creó en el año 2016, y su primera Feria Gastronómica se celebró en el Campus de Gastronomía y Management Culinario del Mediterráneo – Gasma, con el propósito de reforzar el sector agroalimentario de la provincia.
Entre las muchas anécdotas que podría contar sobre estas papas, recuerdo que un compañero de trabajo en BP, basado en Londres (aunque el y su familia eran americanos), venía de vez en cuando a trabajar a la Refinería que BP tiene en Castellón. En estas ocasiones, como el y su familia ya conocían y “amaban” estas papas, venía de Londres con una maleta vacía y volvía con la maleta llena de paquetes de papas.
Recuerdo también en una ocasión el twitt de Carlos Herrera donde hablaba de estas Grandiosas patatas fritas de Castellón. Pa comerse un cubo.
Os invito a probarlas si venís por Castellón.