En el vídeo de la receta de hoy, he utilizado pimientos congelados, como se puede apreciar en el vídeo. Como podéis ver se conservan perfectamente y se pueden utilizar sin ningún problema para cocinar. Lo que hago, es, cuando está el huerto en todo su esplendor, recojo las verduras y las hortalizas, las lavo bien, las dejo secar, las troceo, las meto en bolsas y las congelo, de esa manera tengo para cocinar hasta que llega la próxima temporada y volvemos a tener en la huerta. Y como ya sabéis, me gusta cocinar con los productos lo más naturales y sanos posible, pues esta es la manera de tenerlos cuando no es temporada. De la misma manera podéis hacer lo mismo si tenéis demasiada cantidad de cualquier tipo de verdura, y no la vais a utilizar a corto plazo, lo más probable es que se estropee, pues probar a congelarla, veréis que bien se siente uno cuando se aprovechan mejor los alimentos, y se desperdicia menos.
Para hacer el pisto de pechugas de pollo necesitamos estos ingredientes:
Aceite de oliva.
Media cebolla.
Dos dientes de ajos.
Una pechuga de pollo.
Sal.
Un pimiento rojo.
Un pimiento verde.
Curry.
Salsa de tomate. (si es casera mucho mejor)
En una sartén ponemos un chorro de aceite de oliva, cuando está caliente le echamos la media cebolla bien picada, al poco se añaden los dos dientes de ajos también picados, se rehogan un poco y antes de que cojan color se le añade la pechuga troceada, se le da vueltas para que se dore un poco y a continuación le podemos incluir los pimientos, salamos al gusto, le ponemos el curry, la salsa de tomate, ( si es casera mucho mejor ) lo tapamos y los dejamos cocer al mínimo como media hora, y listo. Así de fácil.
Os dejo el vídeo de la receta reducido a 1 minuto y 51 segundo.
Fuente: este post proviene de Cocina sana Tasym, donde puedes consultar el contenido original.
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