Mis padres son de la Ribera de Navarra. Supongo que no hace falta que os cuente nada más, pero por si acaso, os diré que es una de las zonas de España, por no decir "la zona de España" donde se dan las mejores verduras y hortalizas. Archiconocidos son los cogollos de Tudela, las alcachofas y los espárragos, pasando por el cardo, la borraja... Y muchas más. La verdad es que de todo lo que he nombrado, sólo me gustan los cogollos y el cardo, pero me he dejado las acelgas. Y es que las acelgas hervidas son bastantes sosotas, pero si las hacemos rebozadas ya cambian, y si encima las rellenamos, ni os cuento!
Como no puedo pasaros el olor ni el sabor, os dejo la receta para que las hagáis en casa, eso si, a ver si sois capaces de conseguir unas acelgas con unas pencas como estas:
Estas son del huerto de mi tío Sixto, Mi madre estuvo con él el otro día y cuando las vio, le pidió unas "poquicas" para mi, y el "hombrecico" le dio todas las que tenía en casa en ese momento. Ayyyysss!
Ingredientes:
Acelgas con la penca ancha
Jamón, ibérico mejor, pero si no, serrano
Queso, en mi caso grana padano
1 huevo
Harina
Agua, aceite y sal
Preparación:
Empezamos limpiando las acelgas. Primero las pasamos por agua para retirar los restos de tierra, luego, con un cuchillo sin dientes, vamos quitando los hilillos. A continuación, las cortamos en trozos grandecitos.
Ponemos agua en el fuego, con un poco de sal. Cuando rompa a hervir, echamos las pencas ya cortadas y las dejamos hasta que estén al dente. Retiramos con una espumadera y reservamos, en un plato e intentando que no estén unas encima de las otras, porque si no el agua de la de arriba la chupará la de abajo.
Batimos el huevo y ponemos un bol con harina. Ponemos aceite a calentar en una sartén.
Ahora se trata de coger dos trozos más o menos iguales. Sobre el primer trozo ponemos el jamón y una lonchita de queso, ponemos encima el segundo trozo de penca, enharinamos y pasamos por el huevo. Y directo a la sartén. Esperamos hasta que esté dorado por los dos lados y retiramos a una bandeja cubierta de papel absorbente.
Repetimos la operación con todos los demás trozos.
Notas:
Animaros a hacerlas porque no se nota para nada el sabor de las acelgas, así que es un plato ideal para los peques que no comen verdura.