Lo hemos preparado con una receta rápida y sencilla, para poder saborear la carne de este curioso pescado, del que se consumen básicamente las aletas y que carece de huesos y espinas, ya que su esqueleto es cartilaginoso. Cinco minutos de preparación y el resto nos lo hace el horno, ese gran invento!
Ingredientes
1 kg de raya
300 g de tomates cherrys
1 cebolla roja
aceite de oliva
sal, pimienta negra
Preparación
Precalentar el horno a 180º.
Pelar la cebolla y cortarla en juliana. Lavar y cortar los tomates cherrys por la mitad.
Salpimentar y rociar con aceite de oliva una bandeja de horno. Colocar la raya, que en este caso hemos cortado en dos trozos, en la bandeja y salpimentar la parte superior.
Repartir la cebolla y los tomatitos por los espacios libres y aderezar con sal, pimienta, hierbas provenzales (opcional) y aceite de oliva.
Introducir la bandeja en el horno y asar a 180º durante 20 -25 minutos, en función del tamaño del pescado.
Sacar del horno la raya y retirar la piel superior. Separar con cuidado la carne del esqueleto cartilaginoso: la raya no tiene espinas ni huesos!!!
Retirar los cartílagos y separar la carne de la parte inferior.
Servir acompañada de la cebolla, los cherrys y, si apetece, limón.