Phoskitos Saludables
¿A quién no le alegraban una merienda estas maravillas chocolatosas cuando éramos peques? Yo, es pensar en lo esponjositos que estaban, con esa cubierta de chocolate... ¡y se me cae la baba! Si tú también eres de los míos, hoy traigo una receta que espero que te encante tanto como a mí y aproveches esta cuarentena para ponerte manos a la obra con los más peques de la casa y os déis un buen homenaje saludable.Como siempre, traigo una versión bastante más sana de los tradicionales y ultrapocesadísimos bollitos para que, además de disfrutarlos, demos al cuerpo alegría de la buena.
Si, por el contrario, no te apetece mucho andar encendiendo el horno, te dejo también unas ideas de recetas frías que están para chuparse los dedos como esta Tarta Fría de Coco y Fresa o estos vasitos individuales de Cheesecake de Zanahoria. Si te apetece algo más acorde con las fechas, también tienes una versión de torrijas con estos Bizcochitos de Torrija (al microondas) ¡Que ni todos los coronavirus del mundo nos podrán dejar sin torrijas!
Y, antes de acabar, te recuerdo que los lunes, miércoles y viernes, a las 18:00 puedes conectarte en Instagram (@la.vidaabocados) donde entrenamos juntos y así nos hacemos compañía en tiempos de cuarentena, que siempre viene bien.
Ingredientes (para unos 10 - 12 phoskitos):
Para el bizcocho:
110 gr. de harina integral de trigo100 gr. de leche de avena (o la que uses)
45 gr. de erytritol (o el edulcorante que utilices) - Dependiendo del edulcorante tendrás que ajustar las cantidades. El eyrtritol, por ejemplo, endulza menos que la stevia, de ahí que la cantidad sea mayor.
5 gr. de esencia de vainilla (1 cucharadita de postre)
10 gr. de coco rallado
3 huevos grandes
Para el relleno:
Una lata de leche de coco fría (yo la meto un día antes en la nevera)2 cucharadas soperas de erytritol (o el edulcorante que uses)
1 cucharada sopera colmada de coco rallado
Un chorrito de esencia de vainilla
Para la cobertura:
1 tableta y media de chocolate 85%60 gr. de mantequilla sin sal (sí, la mantequilla es buena y NO margarinas)
20 gr. de cacao desgrasado en polvo
Procedimiento:
Para que el bizcochito quede esponjoso, vamos a separar las claras de las yemas.En un bol, mezcla las yemas con la harina, el edulcorante, la esencia de vainilla y el coco rallado. Después, ve añadiendo la leche poco a poco removiendo constantemente para deshacer todos los grumitos. Cuando tengas la mezcla bien homogénea, deja que repose (no hace falta guardarla en la nevera).
Ahora, las claras que habíamos separado las vamos a montar a punto de nieve. Sabrás que están al punto de nieve cuando demos la vuelta al recipiente y no se caigan.
Cuando tengas la claras montadas, vamos incorporándolas poco a poco a la mezcla. Primero, añade un poco de claras e intégralas con movimientos envolvente de fuera hacia dentro para que la masa quede esponjosa.
Cuando tengas todas las claras ya incorporadas en la mezcla, déjala reposar mientras precalentamos el horno a 180ºC.
Forra una bandeja de horno con papel. Yo tengo uno reutilizable que compré en Lidl en alguna de las semanas que ponen cosas de repostería y estoy esperando a que vuelvan a ponerlas porque es la mejor compra que he hecho en mucho tiempo: no se pega absolutamente nada y sin necesidad de engrasarlo con aceite.
Bueno, que me disperso, forra la bandeja de horno y, cuando el horno ya esté caliente, expande la mezcla de la masa en la bandeja. Intenta que quede repartida de manera uniforme para que se cocine por igual y no haya trozos más gruesos que otros.
Hornea a 180ºC durante 11min. Cuando esté, saca del horno y, en otro papel de horno o en un paño limpio, voltea la masa. Ahora el papel de horno donde hemos cocinado la mezcla, quedará arriba. Quítalo y, con el paño o papel de horno que hemos puesto debajo, y con mucho cuidado, ve enrollando la masa.
Cuando la tengas enrollada, deja enfriar a temperatura ambiente.
Mientras la masa se enfría, vamos a preparar el relleno.
En el vaso de la batidora, vierte la leche de cococ fría y, con ayuda de unas barillas o batidora, monta la leche de coco (al estar fría se queda como una especie de crema espesa que es más fácil de montar y actúa como la nata (crema de leche)).
Cuando tengas montada la leche de coco, agrega el edulcorante, el coco rallado para potencial el sabor y la esencia de vainilla. Vuelve a mezcla y deja la mezcla reposar en la nevera.
Una vez que la masa de bizcocho esté completamente fría, desenrollamos con cuidado y rellenamos con la crema de coco que hemos tenido reposando en la nevera. (Yo la dejé unas 4 horas).
Rellena el bizcocho y vuelve a enrollarlo. Al enrollarlo, asegúrate de ir prensando bien para que quede el relleno dentro y no se nos escape.
Envuelve el rollo en un film transparente y deja en la nevera que vuelva a enfriar. Yo lo dejé toda la noche.
Al día siguiente, cuando ya tengas la masa bien fría, vamos a preparar la cobertura de chocolate.
Para ello, pon todos los ingredientes (chocolate, cacao en polvo y mantequilla) en una cazuela. Puedes sustituir la mantequilla por aceite de coco, si lo prefieres.
Ponemos la cazuela a calentar al baño maría, sin dejar que el agua hierva con fuerza.
Remueve con una espátula y espera a que todo se derrita bien y se mezclen unos ingredientes con otros, hasta tener una mezcla líquida (pero sin exagerar) y brillante.
Saca la masa de la nevera y corta los phoskitos con un grosos más o menos de dos dedos (intenta que queden todos del mismo tamaño).
Cuando los tengas, cúbrelos con el chocolate, ponlos en un plato o bandeja y guarda en la nevera una hora o así para que el chocolate endurezca.
Ya tendríamos nuestros phoskitos listos para disfrutar de una merienda o desayuno de lujo con ingredientes sanos y sin caer en ultraprocesados cargados de harinas refinadas y azúcar.