Os traigo una receta muy rica, más de lo que parece.
Personalmente no soy muy aficionada al pimiento, no me sienta muy bien. Pero los de piquillo rojos que venden en conserva, cuando se hacen rellenos, quedan muy buenos...
Lo podemos poner como plato principal, o bien como aperitivo para el centro de la mesa.
A ver qué os parece.
INGREDIENTES:
- 1 lata de pimientos del piquillo en conserva
- 100 gr. de Philadelphia
- 2-3 latas de atún
- Nata (crema de leche) de cocinar
- Queso para gratinar
- Pimienta negra molida
La cosa es muy fácil: hacemos una pasta mezclando la philadelphia con el atún, bien mezclado. Que haya bastante atún y no sea todo philadelphia... ya sabéis.
Reservamos uno de los pimientos para la salsa.
Con una cuchara, un poquito de paciencia y (muy importante!) las manos bien limpias, vamos abriendo y rellenando los pimientos con la pasta, como en la foto:
En la cocina no hay que tener reparos en pringarse un poco...
Cuando ya estén todos, los colocamos en una fuente. Yo los pongo cada uno mirando para un sitio, así:
Para la salsa cogemos el pimiento que hemos reservado y lo batimos con un poquito de nata (crema de leche), para que se nos quede una salsa de color rosa.
La echamos por encima de los pimientos. Echamos también el queso de gratinar, un poco de pimienta negra en polvo y al horno!
Con 15 minutos de horno a 150º, y 5 minutos gratinando hasta que se dore un poco el queso, hay suficiente.
Bueno, pues eso es todo. Fácil, verdad? Pues os aseguro que está buenísimo!
A la pasta se le puede añadir algún ingrediente más que creáis que le quede bien (olivas negras, bocas de mar, maíz...), probad vosotr@s mism@s y me lo contáis!!
Espero que os guste... para la próxima... un postre que tenía que conseguir hacer... costase lo que costase ;-)