Prueba esta deliciosa combinación de sabores en tu pizza casera y sorprendete con su delicioso sabor. ¡Una pizza vegetariana llena de color con una textura crujiente por fuera y esponjosa por dentro!
En el post anterior les enseñé a hacer una deliciosa masa de pizza casera (si aún no la has visto haz click aquí), y en esta oportunidad les enseño a hacer una pizza con esta base y una combinación de ingredientes que definitivamente los sorprenderá.Lo que me encanta de la pizza es que hay infinitas combinaciones posibles, y es por esto que personalmente nunca me aburro de comer pizza (y tengo que confesar que lo hago con bastante frecuencia).
Hace mucho tiempo probé una versión con dátiles que me encantó por el toque dulce que le aporta, y aprovechando que tenía unos dátiles que me había traído de mi viaje por egipto decidí usarlos en esta receta. Por otro lado, las nueces le dan un toque crujiente muy rico, el queso de cabra le añade muchísimo sabor y por último la albahaca le aporta un toque de frescura (puedes reemplazar esta última por rúcula que también queda muy bien).
Cómo hacer masa de pizza casera. Mira la receta con fotos del paso a paso aquí.
Antes de ir a la receta quiero hacerles unas recomendaciones generales (bajo mi experiencia y un poco de investigación) que les servirán a la hora de armar cualquier tipo de pizza.
Algunas recomendaciones generales a la hora de armar una pizza:
No le pongas mucha salsa de tomate ya que puede matar el sabor de los ingredientes y ablandar la masa (si le pones mucha será más difícil lograr que quede crujiente en el horno)
Utiliza tus manos para darle la forma deseada a la pizza, no uses un uslero ya que de esta forma perderás la posibilidad de darle aire a la masa durante el horneado.
Si le vas a agregar ingredientes frescos como rúcula, albahaca o similar añádelo después del horneado.
No le pongas ingredientes muy jugosos a la pizza ya que éstos pueden ablandar la masa y será más difícil conseguir que quede con una textura crujiente.
No llenes la pizza de ingredientes, debe haber un equilibrio de sabor entre los ingredientes y la masa.
Continuando con la idea anterior, recomiendo no agregar más de 4 ingredientes en la pizza (además del queso y de la salsa de tomate). Recuerda que menos es más.
Si vas a invitar a amigos a comer pizza intenta siempre tener al menos 2 versiones diferentes, una vegetariana y otra carnívora (así tendrás opciones para todos).
Por último decirles que hacer una pizza desde cero no es nada difícil, solo debes seguir las instrucciones y recomendaciones. Si no te sale tan bien a la primera, no te frustres y dale una segunda oportunidad. Como dice el dicho “la práctica hace al maestro” y en el caso de la cocina no puede ser más acertado ;).
Anímense a prepararla y si hay algún ingrediente que no les guste, pueden quitarlo o reemplazarlo sin problema, la idea es experimentar con sabores nuevos y hacer las combinaciones de ingredientes que más les gusten. Más adelante compartiré otra mezcla de sabores (muy diferente a esta) que también me encanta.
¡Vamos con la receta!
Tiempo estimado de preparación: 25 minutos
Porciones: 1 pizza mediana o 2 individuales
Ingredientes
1 masa de pizza casera (aprox 300 gr) – Aprende cómo prepararla aquí
80 gr (4 cucharadas) de salsa de tomate
200 gr de queso granulado (mozzarella, mantecoso (tierno) o mix)
1 rulo de queso de cabra (aprox 100 gr) – También puede ser en bloque o en cubitos.
10 hojas de albahaca fresca (alternativa: 1/2 taza de rúcula)
6 dátiles medianos
Un puñado de nueces
Paso a paso
Precalentar el horno a 250 grados durante 10 minutos
Estirar la masa sobre una superficie enharinada (con harina) y darle la forma deseada con la ayuda de las manos. Intenta NO usar un uslero ya que al usarlo la masa perderá la posibilidad de formar burbujas de aire que se obtienen con el horneado (para obtener una textura esponjosa).
Colocar la masa de la pizza sobre una bandeja de horno (ideal con papel de horno para que luego sea más fácil sacarla).
Agregar aprox 80 gr (4 cucharadas) de salsa de tomate y distribuir uniformemente sobre la masa de la pizza. Añadir el queso granulado de manera uniforme sobre la salsa de tomate.
Luego el rulo de cabra o el queso de cabra en trozos, los dátiles en tiras o trocitos (sacar el hueso y luego cortar en trocitos) y distribuir trocitos de nueces sobre los demás ingredientes.
Colocar la bandeja con la pizza bien abajo en el horno (casi rozando la superficie de abajo) y hornear a 250 grados durante 5 minutos (esto para que la pizza quede crujiente por abajo), luego colocar la bandeja más arriba y terminar de cocinar la pizza durante 5 a 7 minutos o hasta que se derrita el queso y los bordes de la masa se doren levemente.
Sacar del horno y agregar las hojas de albahaca fresca, cortar en trozos antes de servir.
Importante: Las fotos que se muestran aquí son de una pizza de tamaño individual, pero los ingredientes de esta receta son para una pizza mediana.
Tips:
El tiempo de horno es bastante relativo, puede demorar un poco más o un poco menos en estar lista la pizza dado que los hornos son bastante variables.