Pizza de hojaldre con queso de cabra

Pizza de hojaldre con queso de cabra

Hoy Anna nos trae una receta informal para todas aquellas ocasiones en que te apetece comer pizza y quieres disfrutar de una pizza a tu medida, con los ingredientes que más te gustan y decides prepararla tú mismo en casa.Ya sabéis que podéis encontrar sus recetas en su blog "Anna recetas fáciles", del que os recomiendo seguir su página de Facebook para ver todo lo que publica al segundo.

Pizza de hojaldre con queso de cabra, la receta:

La pizza es una receta típica de la cocina italiana, que se ha extendido por todo el mundo. Si ya en Italia tenía muchísimas versiones, en el momento que entró en contacto con otras culturas, esas versiones se han multiplicado añadiendo productos originarios de cada lugar donde se se prepara. Se prepara con una masa hecha con levadura y encima se le coloca una primera capa de tomate, queso y, a partir de ahí, todo lo que te apetezca o encuentres en tu frigorífico y despensa. Muchas veces la preparo de tamaño familiar y la relleno por sectores para contentar a todos.

Empezando por la masa, empieza el repertorio de gustos. Que si gruesa como un pan, que si fina como una hoja de papel y todos los grosores intermedios que puedas imaginarte. Luego, como esta versión que hoy te presento, algunos somos caprichosos y nos gusta crujiente y fina. Ese fue el motivo para elegir la masa de hojaldre, en lugar de la masa para pizza, porque en el supermercado las tienes una al lado de la otra y las dos a un precio muy asequible.



Seguimos con las salsas. El tomate crudo o frito, la salsa barbacoa, pesto, carbonara y sin fin de opciones que puedes tener en cuenta a la hora de prepararla, o bien, aprovechar alguna que ya tengas guardada. Si quieres una salsa de tomate infalible y muy rica, te sugiero que prepares mi receta de Tomate frito casero (aquí), donde además te cuento cómo preparar conserva y así tener siempre a mano este básico de la cocina.

¿Hablamos de quesos? Esto será un no acabar y sólo te voy a decir que uses un queso que funda, normalmente un queso de sabor suave y luego lo combines con el queso que más te guste. La mayor parte de veces, ese segundo queso es el que más a mano tienes. Cada país y cada región tiene sus propias variedades de quesos y todos tienen cabida en nuesta querida pizza.

Los rellenos pues a tu imaginación los dejo. Desde verduras frescas, cocidas o sofritas, hasta las más variadas carnes, pescados, embutidos y conservas varias. Luego algún encurtido que le dé el toque salado como son las olivas, alcaparras o algún otro que te guste especialmente.

Así que ya ves, preparar tu propia pizza es toda una experiencia que debes disfrutar y te aseguro que gozarás con el resultado. Espero que te guste esta versión.

Pizza de hojaldre con queso de cabra, el vídeo:



Pizza de hojaldre con queso de cabra, ingredientes:

1 lámina de masa de hojaldre
3 cucharadas soperas de tomate frito o salsa de tomate
150 gr. de queso mozzarella
6 rodajas de queso de cabra
6 champiñones
6 lonchas de bacon o tocineta
Sal, orégano y romero



Pizza de hojaldre con queso de cabra, preparación:

Precalentar el horno a 200º C. Extender la masa, sobre un papel de horno, o conservar el mismo papel en el que viene envuelta la lámina de hojaldre. Colócala encima de la bandeja donde la vayas a hornear. Cuanto menos se manipule la masa, mucho mejor. Pincha bien con un tenedor toda la superficie para evitar burbujas de aire. Extiende tres cucharadas de salsa de tomate.

Reparte una capa de queso mozzarella a tu gusto. Coloca las rodajas de queso de cabra (grosor de 1 centímetro aproximadamente). Distribuye las tiras de bacon cortadas, dejandó el queso de cabra a la vista. Coloca los champiñones cortados a láminas finas y condimenta con orégano. Espolvorea con unas hojitas de romero encima de cada rodaja de queso de cabra.



Llevar al horno precalentado a media altura. Si ves que le cuesta dorarse a la masa, puedes subir un poco la temperatura. Cuando se haya dorado la masa, puedes retirarlo y lo decoras con unas olivas negras. ¡Sírvela caliente, aunque, si se enfría, estará igualmente deliciosa!

Trucos:

Saca la masa de la nevera 5 minutos antes de preparar tu pizza y así seguirá firme y podrás manipularla con más facilidad. Si la dejas demasiado tiempo fuera del frigorífico, se pondrá blanda y te resultará difícil desenrollarla.

Las cantidades que te sugiero puedes aumentarlas o disminuirlas a tu gusto. Así que si quieres mucho tomate o extra de queso, añádeselo sin miedo.

Puedes usar otros quesos de fundir si prefieres un sabor más o menos potentes para tu pizza, incluso una mezcla de quesos aprovechando los trozos de queso que tengas en tu frigorífico.

El único secreto de la pizza es que no la metas en el horno y te olvides de ella, porque de comer una pizza en su punto, jugosa y colorida,  a comer una pizza demasiado tostada, seca y de color marrón, van solo unos escasos minutos.

Te sugiero que, al presentarla a la mesa, la acompañes con aceite picante. Somos muchos los que agradecemos este detalle del anfitrión. Jamás le pongas el picante antes, a no ser que seas tú quien se la vaya a comer.

¡Espero que te sean de utilidad estos truquitos y que disfrutes de esta rica pizza!

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