Esta semana el reto del grupo Cocinar con Thermomix eran unos estupendos puerros gratinados.
Pero en esta ocasión, la receta de Velocidad Cuchara no es nada light, porque lleva una deliciosa bechamel de bacon. Claro que si queremos cuidarnos un poquito, podemos prescindir del bacon, pero el sabor ahumado que le da a la bechamel, merece saltarse la dieta por un día.
Yo he hecho algunos cambios, como sustituir el queso parmesano por queso cheddar que tenía en la nevera. Por lo demás, todo sigue igual.
INGREDIENTES:
Para los puerros:
3 puerros grandes
500 ml de agua
½ cucharadita de sal
Para la bechamel:
20 gr de aceite de oliva virgen extra
75 gr de bacon en tiras
40 gr de harina de trigo
350 gr de leche
1 pizca de sal
1 pizca de nuez
1 pizca de pimienta
50 gr de queso cheddar para espolvorear
PREPARACIÓN:
Limpiamos los puerros, cortamos la parte verde, la zona de raíces y quitamos la hoja externa. Cortamos por la mitad y los escaldamos 5 minutos en agua hirviendo con sal. Reservamos para que escurran el agua.
Comenzamos picando el queso cheddar, yo he usado cheddar naranja en lonchas. Lo picamos a mano o con la thermomix, 1 segundo a velocidad 6. Reservamos.
Sin lavar el vaso, hacemos lo mismo con las tiras de bacon. Añadimos el aceite y cocinamos 5 minutos, varoma, giro a la izquierda y velocidad 2.
Añadimos la harina y tostamos 2 minutos, Varoma, giro a la izquierda y velocidad 2.
Por último, incorporamos la leche, la pimienta, la nuez moscada y cocinamos 5 minutos, Varoma, giro a la izquierda y velocidad 2 y medio. Cuando falte un minuto para acabar, añadimos por el bocal una cucharada sopera del queso cheddar que teníamos reservado y dejamos acabar.
Untamos una fuente para horno con un poco de aceite. Colocamos los puerros y cubrimos con la bechamel, espolvoreamos con el queso y horneamos a 200ºC con calor arriba y abajo 10 minutos, y luego gratinamos 3 minutos con el grill.
Esta receta se puede hacer sin thermomix, tan solo la hemos usado para la bechamel, pero podéis hacer la bechamel como tengáis costumbre. Si no, seguid estas instrucciones: Picamos menudito el bacón y lo rehogamos un par de minutos con el aceite en una sartén. Añadimos la harina y damos vueltas hasta que pierda el color blanco y esté tostada. Entonces incorporamos la leche, si está caliente mejor, con la pimienta y la nuez moscada y damos vueltas hasta que espese.
El queso cheddar que he usado era en lonchas, me quedaba un resto y había que gastarlo.
Ya está picadito, lo reservamos.
Vamos poniendo los puerros en agua hirviendo, unos cinco minutos. Yo los corté por la mitad, pero es mejor cocerlos enteros y cortarlos después. Los dejamos escurrir.
Ahora vamos con la bechamel. Sin lavar el vaso, picamos las lonchas de bacon.
Añadimos el aceite y cocinamos un poco.
Agregamos la harina y la tostamos.
Y al final, leche, pimienta y nuez moscada. La cocinamos.
Un minuto antes de acabar añadimos un poco de queso .
Ponemos los puerros en una fuente engrasada. Vertemos la bechamel y espolvoreamos el queso. Al horno.
Me encanta el color dorado que da el queso gratinado.
A quien no le guste las verduras es una buena forma de comerlas.