¡Buenos días a todos! ¿Os apetece picotear unos bocaditos de queso Brie con mermelada de tomate? A continuación os damos los trucos para que os salgan perfectos: la primera vez que intentamos esta receta el queso se desparramó por la sartén y nos quedaron unos bocaditos de queso Brie huecos de lo más exótico ;).
Cómo siempre os decimos, de los errores también se aprende. Si una receta no sale bien a la primera ya saldrá bien a la segunda o a la tercera. Aunque no nos engañemos: cuando el día antes de publicar son las 12.00 de la noche te sale un fake en toda regla (pero no un fake gracioso, si no un fake de esos de madre mía que ascazo) y no tienes plan B te quieres morir.
Seguro que si tuviéramos un planning de entradas viviríamos un poco más tranquilas, pero en este pequeño rincón ¡nos gusta vivir al límite! ¿Que por qué os contamos todo esto? Porque aquí somos muy de demostrar que lo que decimos lo hacemos, y en vez de ganar concursos de cocinar bien ¡ganamos concursos de crímenes gastronómicos! Podéis ver la receta con la que ganamos en el siguiente link: Cake pops de coco y jengibre.
¿Y cuál es el truco de la receta de hoy? Pues el queso Brie es un queso con corteza con una textura cómo de pasta así que si queréis que esta receta os salga perfecta es necesario que lo tengáis en la nevera hasta el momento crítico. ¿Os animáis?
Ingredientes para los bocaditos de queso...
1 trozo de queso Brie.
1 huevo.
Pan rallado.
Aceite de oliva abundante para freír.
Ingredientes para la mermelada de tomate...
1kg de tomates (que vendrán a ser unos 500g después de pelados y sin pepitas).
300g de azúcar.
1 limón.
Con las manos en la masa...
Empezamos con la mermelada de tomate: pelamos los tomates (o los escaldamos con agua caliente para que sea más fácil), los troceamos y eliminamos las pepitas.
Trituramos el tomate con la batidora y colocamos en una olla a fuego medio. Añadimos el zumo de limón y el azúcar.
Dejamos que la mermelada se vaya haciendo a fuego medio sin parar de remover con mucho cuidado de no quemarnos (dicen que las quemaduras de caramelo son las peores así que muuuucho cuidado, no queremos acabar en Urgencias).
Seguimos removiendo hasta que la mermelada empiece a tener la consistencia adecuada. Dependerá un poco del jugo de los tomates pero más o menos calculad 45 minutos. Evitad que se evapore todo el agua ya que al enfriar la consistencia de la mezcla aumenta. Dejamos enfriar y ¡a comer!
Para los bocaditos de Brie: Cortamos el queso en triángulo y lo metemos en la nevera hasta el último momento para evitar que se desarme al freírlo.
Batimos un huevo, preparamos un plato con pan rallado y ponemos aceite abundante a calentar en una sartén.
Una vez esté el aceite caliente, vamos pasando los trocitos de queso primero por el huevo y a continuación por el pan rallado. Freímos cada cachito de queso, dándole la vuelta con unas pinzas hasta que estén dorados por todas partes, sacamos de la sartén y dejamos escurrir sobre papel de cocina antes de comer ¡delicioso!
Para la receta de la mermelada, si queréis hacerla en la Thermomix las indicaciones serían: 25 minutos a velocidad 3, 100ºC y, si pasado este tiempo, está aún muy líquida poned 10 minutos a velocidad 3 temperatura Varoma.
Fuente: este post proviene de Con Extra de Queso, donde puedes consultar el contenido original.
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