Cuando alguien se lo merece, no te importa pasarte un poco más de tiempo en la cocina. Eso pensé el otro día cuando por fin vinieron a visitarme un par de amigas, que aunque nos vemos muy poco, estamos siempre en contacto. Me dijeron que se pasarían un día en Barcelona, así que no dudé en invitarlas a comer, pero con el trabajo, el blog, la casa y miles de cosas más no pude pensar en nada hasta en el último momento. Así que unas horas antes, cogí mi bolsa de la compra y me bajé al mercado a ver que me hacía ojitos.
El flechazo fue inmediato. Nada más entrar en el mercado encontré unos higos que me llamaban... Ahora sólo quedaba pensar en donde los iba a poner. Quizás una salsa, para unas carrilleras, o simplemente en el postre, sólos con un poco de yogur de cabra y miel, o por qué no en el entrante como ingrediente principal. Aquí tenéis el resultado que creo que les encantó y espero que a vosotros os guste.
- INGREDIENTES:
1 hoja de pasta brisa
4 higos
2 yogures estilo griego
2 huevos
1 cucharada de salsa pesto
Eneldo, sal y pimienta
Para la salsa
2 cucharadas de mostaza
2 cucharadas de mayonesa
- ELABORACIÓN:
Encendemos el horno a 200º C.
Untamos el molde de la quiche con un poco de mantequilla o aceite. Extendemos encima la masa y presionamos con los dedos por todos los rincones para que coja la forma del mismo. Pinchamos el fondo con un tenedor en cinco o seis sitios para que no suba.
Metemos el horno y dejamos unos diez minutos.
Mientras cortamos la cebolleta en tiras finas de forma vertical (para que quede la forma alargada típica de la cebolleta). La pochamos ligeramente en una sartén con un chorrito de aceite un poco de sal. Una vez que empiece a coger color. Retiramos y reservamos.
Batimos los huevos junto con los yogures, el pesto y un poco de pimienta, dos higos machacados y eneldo fresco.
Cortamos los higos en cuartos.
Sacamos la masa del horno y vertemos por encima la mezcla de huevo y yogur. Colocamos por encima la cebolleta pochada y los higos en cuartos.
Metemos en el horno a 200ºC durante unos 20 minutos o hasta que el huevo esté bien cuajado. Sacamos y dejamos enfriar diez minutos antes de desmoldar.
Servimos tibio o frío, acompañado de una salsa elaborada mitad con mayonesa, mitad con mostaza.
- MARIDAJE:
El toque dulce de los higos y la cebolla ligeramente pochada combinan perfectamente con un tinto ligeramente fresco elaborado con uva Garnacha del Penedés.
- COSTE: barato.
- DIFICULTAD: fácil.
- TIEMPO: 40 minutos.
- CALÓRICO: un plato para tomar una vez de vez en cuando.
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