Hoy he preparado para comer este esplendido tajine de pollo que hará las delicias de todos aquellos a los que les guste la comida exótica así como la comida picante.
Es un tajine de pollo con cuscús al que también se le podrían poner ciruelas, pasas o almendras.
Para preparar este plato lo ideal sería tener en casa una cazuelita de las propiamente dichas tajine que son unas cazuelas de barro cocido con una tapa de forma cónica que evita que se escape el vapor y hace que circule por su interior de manera que sin necesidad de remover toda la comida se impregna de los sabores y aromas de las especies.
Yo tengo un cocotte de hierro fundido como este y también funciona perfectamente ya que la tapa pesa mucho y no permite que se escape el vapor, aunque lo ideal sería un Tajín ya que su forma propicia la correcta circulación del aire.
A malas, si quieres prepararlo en tu cazuela, te recomendaría coger una cuya tapa pese bastante, y no destaparla en toda la cocción.
Ingredientes para 4 personas:
4 cuartos de pollo, separados en 2 trozos (muslo y contramuslo)
1 puerro
1 cebolla
1 diente de ajo
2 cucharadas de Ras el Hanout (del que ya te hable aquí http://cookslow.es/espinacas-marroquis/ )
1 cucharadita de canela molida
1 cucharadita de pulpa de pimiento choricero
1 cucharadita de concentrado de tomate (o 2 de tomate frito si no tienes)
400 ml de caldo de pollo
1 calabacín
2 zanahorias grandes
Ingredientes para el cuscús para 4 personas:
2 vasos de cuscús
3 vasos de agua o caldo de pollo
1 cucharadita de comino molido
Preparación:
Primero de todo limpiamos bien el pollo, lo salpimentamos y lo ponemos en la cazuela con un poco de aceite para dorarlo. Una vez dorado lo sacamos y lo reservamos.
En el aceite que ha quedado en la cazuela añadimos la cebolla y el puerro troceados y dejamos que se sofría a fuego lento, añadimos el diente de ajo machacado (yo utilizo un prensa ajos pero si no tienes puedes trocearlo muy pequeño o usar el mortero).
Cuando ya lo tenemos pochado es el turno de poner el Ras el Hanout (ojo, aquí se ponen 2 cucharadas y ¡pica! Si no eres muy fan de los platos picantes pon solo una) y la canela y lo dejamos unos segundos antes de añadir los ingredientes húmedos, de esta manera con el calor empieza a desprender todos sus aromas. A continuación añadimos la pulpa de pimiento choricero y el concentrado de tomate, volvemos a remover bien y añadimos el caldo de pollo.
Mientras el caldo se va calentando ponemos en el fondo, encima de la cebolla y el puerro, a continuación ponemos el calabacín troceado en trozos grandes y las zanahorias, yo las he cortado por la mitad y luego cada trozo a lo largo.
Una de las cosas maravillosas del Tajine es que al no remover, y cocinarse a fuego lento, cuando se destapa los ingredientes tienen la misma distribución que cuando los colocamos, así que nos esforzaremos un poco en colocar los ingredientes de manera que quede atractivo.
Lo tapamos bien y lo ponemos a fuego bajo unos 35-40 minutos sin destapar en ningún momento.
Cuando queden unos 15 minutos para el final de la cocción vamos a preparar el cuscús:
Ponemos en un cazo el caldo con el comino a hervir. Cuando empieza a hervir añadimos el cuscús, removemos, apagamos el fuego y tapamos. Lo dejamos reposar tapado durante 10 minutos, y ¡ya lo tendremos listo!
Para servir ponemos la ración del cuscús junto con dos trozos de pollo, una buena ración de verduritas y regamos con la propia salsa del pollo.
Si queremos poner unas pasas, orejones o ciruelas habría que ponerlos en remojo en agua fría aproximadamente una hora antes de utilizarlos. En agua caliente se hidratarían más rápido pero perderían parte de su sabor.
Hay quien prefiere poner un puñado de garbanzos ya cocidos (aquí tienes una forma muy sencilla de cocerlos tú mismo) o incluso unas olivas.
Cualquiera de estos ingredientes se añadiría junto con las verduras para que así se impregnen de los aromas.
Espero que te haya gustado la receta si decides prepararla sobretodo ¡etiquétame para que pueda ver cómo te ha quedado!
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Un abrazo,
Mónica