Recuerdos imborrables de olores, sabores y buenos momentos con mi abuela, mi tía-abuela, mi madre y mi hermana.
Están tan buenos que no éramos capaces de esperarnos a que se enfriaran para probarlos. Una de esas recetas que pasan de generación en generación y que he querido compartir con vosotros a través de las manos de mi madre, que he decir le han salido de muerte!!!
Ingredientes:
.1 huevo
.Raspadura de limón (al gusto)
.1 gaseosa
.1 taza de café de azúcar
.1 taza de café de aceite de girasol
.1 taza de café de zumo de naranja
.1 taza de café de vino blanco
.Harina (hasta que admita y quede una masa manejable)
.Aceite de oliva para freír
.Azúcar
Elaboración
Batir el huevo bien.
Incorporar el azúcar y volver a batir.
Añadir el resto de ingredientes, excepto la harina, y mezclar bien.
Al final añadir la harina, poco a poco, e ir amasando bien hasta conseguir una masa homogénea y manejable.
Amasar bien en una superficie limpia y enharinada. Tapar y dejar reposar durante media hora.
Cuando haya pasado ese tiempo, coger pequeñas porciones y darles formas de rollos. Freír en aceite de oliva hasta que estén doraditos. Escurrirlos en papel de cocina y después pasar por azúcar.
*Si sois muchos en casa os recomiendo duplicar cantidades o incluso triplicar si son para alguna fiesta y tenéis muchos invitados porque son como las pipas, no puedes parar de comerlos!!!