Lo bueno es que se pueden hacer muchos (con eso de aprovechar todas las hojas de masa brick) y congelar los que no queremos gastar antes de freír u hornear. En mi caso los hago al horno ya que fritos cogen mucha grasa y no me gusta. Si los hacéis como os explico casi no notaréis la diferencia.
Otra cosa es que si veis que se os rompe la hoja brick al hacer los rollitos (el relleno puede estar muy húmedo), intentad escurrir todo el líquido posible y usad dos hojas para cada rollito.
Ingredientes:
200 gr de bacon partido en trozos pequeños
1 puerro muy picado
1/4 de repollo pequeño picado muy fino
1 zanahoria pequeña muy picada
1 paquete de masa brick
maíz
salsa de soja
aceite de sésamo
aceite de oliva
Para la salsa
1 vaso de zumo de naranja
3 cucharadas de tomate frito
1 cucharada de azúcar
1 cucharadita de maizena
sal
Preparación:
En un wok a fuego alto ponemos el bacon y lo dejamos hacer en su grasa. Separamos el bacon cuando empieza a tostarse. En esa misma grasa (si vemos que hace falta un poco más echamos aceite de sésamo) ponemos la zanahoria y el puerro y cuando veamos que empieza a ablandarse la zanahoria ponemos el repollo y el maíz junto con la salsa de soja. Dejamos unos 5 minutos que se haga el repollo pero tiene que quedar crujiente. Agregamos el bacon y dejamos un par de minutos más. Quitamos del fuego y dejamos enfriar. Si vemos que la masa tiene mucho líquido dejar escurrir.
Para hacer los rollitos cogemos una hoja brick y ponemos un poco de relleno haciendo una línea. Doblamos para dentro los extremos de la hoja perpendiculares al relleno y envolvemos el relleno de forma que quede un rollito. Sellamos al final usando un poco de agua.
Una vez tengamos todos los rollitos preparados los pincelamos con aceite de oliva y los metemos en el horno precalentado a 200º durante 15 minutos o hasta que veamos que están tostados.
Para preparar la salsa agridulce echamos en un cazo todos los ingredientes habiendo desleído la maizena en el zumo de naranja previamente. Ponemos al fuego y dejamos reducir hasta que veamos que empieza a espesarse. Probamos y ajustamos el toque de azúcar y sal. Dejamos enfriar antes de usar.