Hace tiempo que me apetecía preparar este plato, pero un día por otro..nada. Hasta que el otro día decidí hacerlo. El teriyaki es una técnica de cocción por la cual el pescado o la carne se asan en el horno o la parrilla en un adobo de salsa dulce. Tenía el problema de que no tenía varios ingredientes de los que lleva la salsa original, como el mirin y el sake. Por lo que echando un vistazo por la red recordé que Juana lo tenía publicado, y mi sorpresa fue que su versión si que llevaba ingredientes que tenía en casa. Aunque ella le pone miel y yo decidí sustituirlo por sirope dorado ya que tenía un bote a punto de caducar. El resultado ha sido muy bueno, a mi marido le ha gustado muchísimo este salmón. Lo que no le gustó mucho fueron los fideos de arroz con los que lo acompañé, tenía que haber puesto el acompañamiento de Juana que eran unas hojas de rúcula y un poco de arroz basmati....pero de esto que compras unos fideos de arroz y los tienes muertos de risa hasta que decides usarlo...y eso es lo que a mi me paso. Al resto del envase le daré una segunda oportunidad, je,je...
INGREDIENTES:
1 filete de salmón grandecito
125 ml. de miel o sirope dorado (golen sirup)
125 ml. de agua
El zumo de medio limón
70 ml. de salsa de soja
1/2 cucharadita de jengibre molido
Cilantro y sésamo para decorar
PREPARACIÓN:
En un cazo ponemos la miel o el sirope dorado, el agua, la salsa de soja, el zumo de limón y el jengibre. Llevamos a ebullición durante unos tres minutos. Retiramos del fuego y dejamos enfriar. Una vez fría, ponemos el salmón en una una fuente donde nos quepa todo (podéis trocearlo previamente, yo lo hice después, como véis en la foto), y cubrimos con la salsa. Dejamos durante dos horas al menos, o de un día para otro. Yo lo tuve sólo dos horas, cuánto más tiempo dure la maceración menos cocción necesitará en el horno, porque se cocina en la misma salsa. Una vez pasadas las horas de maceración, sacamos el salmón y lo ponemos cortado, con la piel hacia arriba en una bandeja de horno, cubierta con papel de hornear. Horneamos de diez a quince minutos, y mientras reducimos la salsa en un cazo, hasta que nos espese. Servimos el salmón con un poco de sésamos tostado, la salsa y unas hojas de cilantro para decorar.
Pues ya véis lo bien que queda este plato y su salsa. Está realmente bueno y no tiene ninguna dificultad. Si queréis macerarlo durante toda la noche pues ya sabéis, lo preparáis la noche antes, si no os gusta tanta maceración, pues lo hacéis unas horas antes. De cualquier forma estará delicioso si os gustan este tipo de platos.
Feliz fin de semana.
Lidia.
Fuente: este post proviene de Atrapada en mi cocina, donde puedes consultar el contenido original.
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