Receta de samfaina (o sanfaina)
Plato: Entrantes
Cocina: Catalana
Dificultad: Fácil
Raciones: 6 raciones
Calorías por ración: 155 kcal
Tiempo de reposo: 2 horas
Tiempo total: 3 horas
Ingredientes
2 dientes de ajo1 pimiento rojo grande
2 pimientos verdes italianos
2 cebollas medianas
8 tomates maduros grandes o 1 lata de tomate triturado natural
2 calabacines grandes
2 berenjenas
4 cucharadas soperas de aceite de oliva
1 cucharada de postre de sal
CÓMO HACER SANFAINA
Lava todas las verduras bajo el grifo y sécalas con papel de cocina. Pela las dos cebollas y córtalas en trozos no demasiado pequeños. Resérvalas en un plato mientras sigues cortando el resto de verduras.
Corta el pimiento rojo, retira las semillas de su interior y la parte blanca también. Corta el pimiento en tiras y después en trozos del mismo tamaño que la cebolla, más o menos. Resérvalo en otro plato aparte ya que las verduras se van a cocinar con diferentes tiempos y así te será más fácil de separar.
Limpia los dos pimientos verdes igual que el pimiento rojo, retirando las semillas y cortándolos en trozos del mismo tamaño que el resto de verduras. Ponlos en el mismo plato donde has reservado el pimiento rojo.
Corta 8 tomates grandes por la mitad, rállalos y resérvalos para después. Si lo prefieres, en su lugar puedes usar tomate triturado natural en lata.
Pela los dos calabacines, puedes dejar trozos de piel para que resalte el color en el guiso. Una vez pelados, córtalos en trozos. Como el calabacín es prácticamente agua y se va a cocinar enseguida, puedes cortarlos en trozos algo más grandes. Resérvalos en otro plato aparte.
Deja para el final las berenjenas ya que una vez cortadas se oxidan y tienden a oscurecerse. Una vez peladas, corta dos berenjenas en trozos más o menos del mismo tamaño que el resto de verduras. Ponlas en el mismo plato que el calabacín.
Pon al fuego una cazuela amplia y añade cuatro cucharadas de aceite de oliva. Cuando se haya calentado, añade dos ajos cortados pequeños y sofríe durante 2 minutos.
Añade el pimiento rojo y verde. Remueve para que absorban las verduras el sabor de los ajos y cocina a fuego medio-lento unos 10 minutos. Para evitar que las verduras se peguen o se oscurezcan más de un lado que de otro, remueve de vez en cuando mientras se cocinen.
Pasados los 10 minutos, añade las cebollas cortadas. Remueve para mezclar todas las verduras y cocina a la misma temperatura unos 5 minutos más. También removiendo de cuando en cuando.
Agrega los calabacines y las berenjenas cortadas. Mezcla bien todas las verduras y sigue cocinando unos 5 minutos más.
Pasados los 5 minutos, añade los tomates rallados o el tomate triturado natural en lata. Agrega también la sal y mezcla bien todos los ingredientes. Tapa la cazuela y deja cocinar a fuego lento unos 20 minutos, removiendo varias veces. Cuando rompa a hervir, deja un pequeño espacio con la tapa para que las verduras respiren. Si notas que la samfaina queda algo seca, puedes añadir una pizca de caldo de verduras o agua.
Pasados los 20 minutos, la salsa tendrá este aspecto. Apaga el fuego y deja reposar durante 2 horas antes de comerla.
Platos con los que puedes acompañar la samfaina
Al ser un plato a base de verduras, la samfaina es el acompañamiento ideal en múltiples platos.Para acompañar platos de pescado como lubina o salmón al horno, queda perfecta.
Cuando prepares tortilla francesa o tortilla de patatas, puedes usar esta rica salsa catalana como guarnición. También con esta versión de tortilla de patatas con sobrasada y queso Brie queda deliciosa.
Como base para guisos al preparar arroz con conejo o arroz al curry. Y también para acompañar estas hamburguesas de cocido.
Otros platos perfectos para acompañarla son los guisos de pollo, como el pollo a la mostaza.
Pero si hay un plato que destaque y que aquí en Cataluña se use mucho para acompañar esta salsa es el bacalao. Un plato que desde bien pequeña mis padres preparaban en casa y un clásico de la cocina catalana.
Esta salsa de verduras pega con cualquier plato realmente. Como base de guisos, como acompañamiento o incluso como plato único, con pan eso sí.
¡Buen provecho, familia!